Local view for "http://purl.org/linkedpolitics/eu/plenary/2012-05-09-Speech-3-179-000"
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"Señor Presidente, la posición de mi Grupo ya la ha fijado el señor Murphy en su intervención y yo creo, señor Presidente, que la Unión Europea no está para dar consejos a ninguna región del mundo en lo referente a cualquier modelo económico o comercial. No estamos para dar consejos, y mucho menos consejos sobre la base de la necesidad de desregular el mercado.
Ese principio, ese dogma, el «gran Dios» de la desregulación del mercado, que se ha aplicado con total rigidez en la Unión Europea, nos está llevando a la ruina en la Unión Europea y, por lo tanto, ese principio es un principio que no se debería plantear, y espero que los protagonistas de las revoluciones árabes no lo hagan suyo. No se trata de ir a tratados de libre comercio que no tengan en cuenta las asimetrías, ya que ello empobrecería más a esos pueblos.
Y mire usted, la tarjeta de visita que se entregó en su día a los países ribereños –la tarjeta de visita dada a Ben Alí, a Mubarak o a Gadafi, la que hemos entregado a Mohamed VI– es que a la Unión Europea el desarrollo económico le importa poco. Lo que le importa son los grandes negocios."@es21
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"Señor Presidente, la posición de mi Grupo ya la ha fijado el señor Murphy en su intervención y yo creo, señor Presidente, que la Unión Europea no está para dar consejos a ninguna región del mundo en lo referente a cualquier modelo económico o comercial. No estamos para dar consejos, y mucho menos consejos sobre la base de la necesidad de desregular el mercado.
Ese principio, ese dogma, el «gran Dios» de la desregulación del mercado, que se ha aplicado con total rigidez en la Unión Europea, nos está llevando a la ruina en la Unión Europea y, por lo tanto, ese principio es un principio que no se debería plantear, y espero que los protagonistas de las revoluciones árabes no lo hagan suyo. No se trata de ir a tratados de libre comercio que no tengan en cuenta las asimetrías, ya que ello empobrecería más a esos pueblos.
Y mire usted, la tarjeta de visita que se entregó en su día a los países ribereños –la tarjeta de visita dada a Ben Alí, a Mubarak o a Gadafi, la que hemos entregado a Mohamed VI– es que a la Unión Europea el desarrollo económico le importa poco. Lo que le importa son los grandes negocios."@cs1
"Señor Presidente, la posición de mi Grupo ya la ha fijado el señor Murphy en su intervención y yo creo, señor Presidente, que la Unión Europea no está para dar consejos a ninguna región del mundo en lo referente a cualquier modelo económico o comercial. No estamos para dar consejos, y mucho menos consejos sobre la base de la necesidad de desregular el mercado.
Ese principio, ese dogma, el «gran Dios» de la desregulación del mercado, que se ha aplicado con total rigidez en la Unión Europea, nos está llevando a la ruina en la Unión Europea y, por lo tanto, ese principio es un principio que no se debería plantear, y espero que los protagonistas de las revoluciones árabes no lo hagan suyo. No se trata de ir a tratados de libre comercio que no tengan en cuenta las asimetrías, ya que ello empobrecería más a esos pueblos.
Y mire usted, la tarjeta de visita que se entregó en su día a los países ribereños –la tarjeta de visita dada a Ben Alí, a Mubarak o a Gadafi, la que hemos entregado a Mohamed VI– es que a la Unión Europea el desarrollo económico le importa poco. Lo que le importa son los grandes negocios."@da2
"Señor Presidente, la posición de mi Grupo ya la ha fijado el señor Murphy en su intervención y yo creo, señor Presidente, que la Unión Europea no está para dar consejos a ninguna región del mundo en lo referente a cualquier modelo económico o comercial. No estamos para dar consejos, y mucho menos consejos sobre la base de la necesidad de desregular el mercado.
Ese principio, ese dogma, el «gran Dios» de la desregulación del mercado, que se ha aplicado con total rigidez en la Unión Europea, nos está llevando a la ruina en la Unión Europea y, por lo tanto, ese principio es un principio que no se debería plantear, y espero que los protagonistas de las revoluciones árabes no lo hagan suyo. No se trata de ir a tratados de libre comercio que no tengan en cuenta las asimetrías, ya que ello empobrecería más a esos pueblos.
Y mire usted, la tarjeta de visita que se entregó en su día a los países ribereños –la tarjeta de visita dada a Ben Alí, a Mubarak o a Gadafi, la que hemos entregado a Mohamed VI– es que a la Unión Europea el desarrollo económico le importa poco. Lo que le importa son los grandes negocios."@de9
"Señor Presidente, la posición de mi Grupo ya la ha fijado el señor Murphy en su intervención y yo creo, señor Presidente, que la Unión Europea no está para dar consejos a ninguna región del mundo en lo referente a cualquier modelo económico o comercial. No estamos para dar consejos, y mucho menos consejos sobre la base de la necesidad de desregular el mercado.
Ese principio, ese dogma, el «gran Dios» de la desregulación del mercado, que se ha aplicado con total rigidez en la Unión Europea, nos está llevando a la ruina en la Unión Europea y, por lo tanto, ese principio es un principio que no se debería plantear, y espero que los protagonistas de las revoluciones árabes no lo hagan suyo. No se trata de ir a tratados de libre comercio que no tengan en cuenta las asimetrías, ya que ello empobrecería más a esos pueblos.
Y mire usted, la tarjeta de visita que se entregó en su día a los países ribereños –la tarjeta de visita dada a Ben Alí, a Mubarak o a Gadafi, la que hemos entregado a Mohamed VI– es que a la Unión Europea el desarrollo económico le importa poco. Lo que le importa son los grandes negocios."@el10
"Mr President, Mr Murphy has already stated the position of the Confederal Group of the European United Left – Nordic Green Left in his speech and I believe, Mr President, that the European Union is not in a position to be giving advice to any region in the world with regard to economic models or trade models. We are in no position to give advice, and even less so advice based on the need to deregulate the market.
This principle, this dogma, the ‘great God’ of deregulating the market, which has been applied with the utmost rigidity in the European Union, is leading us to ruin in the European Union and, therefore, this principle is a principle that should not be followed, and I hope that the leaders of the Arab revolutions do not do so themselves. It is not about moving towards free trade agreements that fail to take into account the imbalances, since that would impoverish these populations further.
Look, the calling card left to coastal countries in its day – the calling card given to Ben Ali, Mubarak or Gaddafi, which we have given to Mohammed VI – is that the European Union cares little about economic development. What it cares about is big business."@en4
"Señor Presidente, la posición de mi Grupo ya la ha fijado el señor Murphy en su intervención y yo creo, señor Presidente, que la Unión Europea no está para dar consejos a ninguna región del mundo en lo referente a cualquier modelo económico o comercial. No estamos para dar consejos, y mucho menos consejos sobre la base de la necesidad de desregular el mercado.
Ese principio, ese dogma, el «gran Dios» de la desregulación del mercado, que se ha aplicado con total rigidez en la Unión Europea, nos está llevando a la ruina en la Unión Europea y, por lo tanto, ese principio es un principio que no se debería plantear, y espero que los protagonistas de las revoluciones árabes no lo hagan suyo. No se trata de ir a tratados de libre comercio que no tengan en cuenta las asimetrías, ya que ello empobrecería más a esos pueblos.
Y mire usted, la tarjeta de visita que se entregó en su día a los países ribereños –la tarjeta de visita dada a Ben Alí, a Mubarak o a Gadafi, la que hemos entregado a Mohamed VI– es que a la Unión Europea el desarrollo económico le importa poco. Lo que le importa son los grandes negocios."@et5
"Señor Presidente, la posición de mi Grupo ya la ha fijado el señor Murphy en su intervención y yo creo, señor Presidente, que la Unión Europea no está para dar consejos a ninguna región del mundo en lo referente a cualquier modelo económico o comercial. No estamos para dar consejos, y mucho menos consejos sobre la base de la necesidad de desregular el mercado.
Ese principio, ese dogma, el «gran Dios» de la desregulación del mercado, que se ha aplicado con total rigidez en la Unión Europea, nos está llevando a la ruina en la Unión Europea y, por lo tanto, ese principio es un principio que no se debería plantear, y espero que los protagonistas de las revoluciones árabes no lo hagan suyo. No se trata de ir a tratados de libre comercio que no tengan en cuenta las asimetrías, ya que ello empobrecería más a esos pueblos.
Y mire usted, la tarjeta de visita que se entregó en su día a los países ribereños –la tarjeta de visita dada a Ben Alí, a Mubarak o a Gadafi, la que hemos entregado a Mohamed VI– es que a la Unión Europea el desarrollo económico le importa poco. Lo que le importa son los grandes negocios."@fi7
"Señor Presidente, la posición de mi Grupo ya la ha fijado el señor Murphy en su intervención y yo creo, señor Presidente, que la Unión Europea no está para dar consejos a ninguna región del mundo en lo referente a cualquier modelo económico o comercial. No estamos para dar consejos, y mucho menos consejos sobre la base de la necesidad de desregular el mercado.
Ese principio, ese dogma, el «gran Dios» de la desregulación del mercado, que se ha aplicado con total rigidez en la Unión Europea, nos está llevando a la ruina en la Unión Europea y, por lo tanto, ese principio es un principio que no se debería plantear, y espero que los protagonistas de las revoluciones árabes no lo hagan suyo. No se trata de ir a tratados de libre comercio que no tengan en cuenta las asimetrías, ya que ello empobrecería más a esos pueblos.
Y mire usted, la tarjeta de visita que se entregó en su día a los países ribereños –la tarjeta de visita dada a Ben Alí, a Mubarak o a Gadafi, la que hemos entregado a Mohamed VI– es que a la Unión Europea el desarrollo económico le importa poco. Lo que le importa son los grandes negocios."@fr8
"Señor Presidente, la posición de mi Grupo ya la ha fijado el señor Murphy en su intervención y yo creo, señor Presidente, que la Unión Europea no está para dar consejos a ninguna región del mundo en lo referente a cualquier modelo económico o comercial. No estamos para dar consejos, y mucho menos consejos sobre la base de la necesidad de desregular el mercado.
Ese principio, ese dogma, el «gran Dios» de la desregulación del mercado, que se ha aplicado con total rigidez en la Unión Europea, nos está llevando a la ruina en la Unión Europea y, por lo tanto, ese principio es un principio que no se debería plantear, y espero que los protagonistas de las revoluciones árabes no lo hagan suyo. No se trata de ir a tratados de libre comercio que no tengan en cuenta las asimetrías, ya que ello empobrecería más a esos pueblos.
Y mire usted, la tarjeta de visita que se entregó en su día a los países ribereños –la tarjeta de visita dada a Ben Alí, a Mubarak o a Gadafi, la que hemos entregado a Mohamed VI– es que a la Unión Europea el desarrollo económico le importa poco. Lo que le importa son los grandes negocios."@hu11
"Señor Presidente, la posición de mi Grupo ya la ha fijado el señor Murphy en su intervención y yo creo, señor Presidente, que la Unión Europea no está para dar consejos a ninguna región del mundo en lo referente a cualquier modelo económico o comercial. No estamos para dar consejos, y mucho menos consejos sobre la base de la necesidad de desregular el mercado.
Ese principio, ese dogma, el «gran Dios» de la desregulación del mercado, que se ha aplicado con total rigidez en la Unión Europea, nos está llevando a la ruina en la Unión Europea y, por lo tanto, ese principio es un principio que no se debería plantear, y espero que los protagonistas de las revoluciones árabes no lo hagan suyo. No se trata de ir a tratados de libre comercio que no tengan en cuenta las asimetrías, ya que ello empobrecería más a esos pueblos.
Y mire usted, la tarjeta de visita que se entregó en su día a los países ribereños –la tarjeta de visita dada a Ben Alí, a Mubarak o a Gadafi, la que hemos entregado a Mohamed VI– es que a la Unión Europea el desarrollo económico le importa poco. Lo que le importa son los grandes negocios."@it12
"Señor Presidente, la posición de mi Grupo ya la ha fijado el señor Murphy en su intervención y yo creo, señor Presidente, que la Unión Europea no está para dar consejos a ninguna región del mundo en lo referente a cualquier modelo económico o comercial. No estamos para dar consejos, y mucho menos consejos sobre la base de la necesidad de desregular el mercado.
Ese principio, ese dogma, el «gran Dios» de la desregulación del mercado, que se ha aplicado con total rigidez en la Unión Europea, nos está llevando a la ruina en la Unión Europea y, por lo tanto, ese principio es un principio que no se debería plantear, y espero que los protagonistas de las revoluciones árabes no lo hagan suyo. No se trata de ir a tratados de libre comercio que no tengan en cuenta las asimetrías, ya que ello empobrecería más a esos pueblos.
Y mire usted, la tarjeta de visita que se entregó en su día a los países ribereños –la tarjeta de visita dada a Ben Alí, a Mubarak o a Gadafi, la que hemos entregado a Mohamed VI– es que a la Unión Europea el desarrollo económico le importa poco. Lo que le importa son los grandes negocios."@lt14
"Señor Presidente, la posición de mi Grupo ya la ha fijado el señor Murphy en su intervención y yo creo, señor Presidente, que la Unión Europea no está para dar consejos a ninguna región del mundo en lo referente a cualquier modelo económico o comercial. No estamos para dar consejos, y mucho menos consejos sobre la base de la necesidad de desregular el mercado.
Ese principio, ese dogma, el «gran Dios» de la desregulación del mercado, que se ha aplicado con total rigidez en la Unión Europea, nos está llevando a la ruina en la Unión Europea y, por lo tanto, ese principio es un principio que no se debería plantear, y espero que los protagonistas de las revoluciones árabes no lo hagan suyo. No se trata de ir a tratados de libre comercio que no tengan en cuenta las asimetrías, ya que ello empobrecería más a esos pueblos.
Y mire usted, la tarjeta de visita que se entregó en su día a los países ribereños –la tarjeta de visita dada a Ben Alí, a Mubarak o a Gadafi, la que hemos entregado a Mohamed VI– es que a la Unión Europea el desarrollo económico le importa poco. Lo que le importa son los grandes negocios."@lv13
"Señor Presidente, la posición de mi Grupo ya la ha fijado el señor Murphy en su intervención y yo creo, señor Presidente, que la Unión Europea no está para dar consejos a ninguna región del mundo en lo referente a cualquier modelo económico o comercial. No estamos para dar consejos, y mucho menos consejos sobre la base de la necesidad de desregular el mercado.
Ese principio, ese dogma, el «gran Dios» de la desregulación del mercado, que se ha aplicado con total rigidez en la Unión Europea, nos está llevando a la ruina en la Unión Europea y, por lo tanto, ese principio es un principio que no se debería plantear, y espero que los protagonistas de las revoluciones árabes no lo hagan suyo. No se trata de ir a tratados de libre comercio que no tengan en cuenta las asimetrías, ya que ello empobrecería más a esos pueblos.
Y mire usted, la tarjeta de visita que se entregó en su día a los países ribereños –la tarjeta de visita dada a Ben Alí, a Mubarak o a Gadafi, la que hemos entregado a Mohamed VI– es que a la Unión Europea el desarrollo económico le importa poco. Lo que le importa son los grandes negocios."@mt15
"Señor Presidente, la posición de mi Grupo ya la ha fijado el señor Murphy en su intervención y yo creo, señor Presidente, que la Unión Europea no está para dar consejos a ninguna región del mundo en lo referente a cualquier modelo económico o comercial. No estamos para dar consejos, y mucho menos consejos sobre la base de la necesidad de desregular el mercado.
Ese principio, ese dogma, el «gran Dios» de la desregulación del mercado, que se ha aplicado con total rigidez en la Unión Europea, nos está llevando a la ruina en la Unión Europea y, por lo tanto, ese principio es un principio que no se debería plantear, y espero que los protagonistas de las revoluciones árabes no lo hagan suyo. No se trata de ir a tratados de libre comercio que no tengan en cuenta las asimetrías, ya que ello empobrecería más a esos pueblos.
Y mire usted, la tarjeta de visita que se entregó en su día a los países ribereños –la tarjeta de visita dada a Ben Alí, a Mubarak o a Gadafi, la que hemos entregado a Mohamed VI– es que a la Unión Europea el desarrollo económico le importa poco. Lo que le importa son los grandes negocios."@nl3
"Señor Presidente, la posición de mi Grupo ya la ha fijado el señor Murphy en su intervención y yo creo, señor Presidente, que la Unión Europea no está para dar consejos a ninguna región del mundo en lo referente a cualquier modelo económico o comercial. No estamos para dar consejos, y mucho menos consejos sobre la base de la necesidad de desregular el mercado.
Ese principio, ese dogma, el «gran Dios» de la desregulación del mercado, que se ha aplicado con total rigidez en la Unión Europea, nos está llevando a la ruina en la Unión Europea y, por lo tanto, ese principio es un principio que no se debería plantear, y espero que los protagonistas de las revoluciones árabes no lo hagan suyo. No se trata de ir a tratados de libre comercio que no tengan en cuenta las asimetrías, ya que ello empobrecería más a esos pueblos.
Y mire usted, la tarjeta de visita que se entregó en su día a los países ribereños –la tarjeta de visita dada a Ben Alí, a Mubarak o a Gadafi, la que hemos entregado a Mohamed VI– es que a la Unión Europea el desarrollo económico le importa poco. Lo que le importa son los grandes negocios."@pl16
"Señor Presidente, la posición de mi Grupo ya la ha fijado el señor Murphy en su intervención y yo creo, señor Presidente, que la Unión Europea no está para dar consejos a ninguna región del mundo en lo referente a cualquier modelo económico o comercial. No estamos para dar consejos, y mucho menos consejos sobre la base de la necesidad de desregular el mercado.
Ese principio, ese dogma, el «gran Dios» de la desregulación del mercado, que se ha aplicado con total rigidez en la Unión Europea, nos está llevando a la ruina en la Unión Europea y, por lo tanto, ese principio es un principio que no se debería plantear, y espero que los protagonistas de las revoluciones árabes no lo hagan suyo. No se trata de ir a tratados de libre comercio que no tengan en cuenta las asimetrías, ya que ello empobrecería más a esos pueblos.
Y mire usted, la tarjeta de visita que se entregó en su día a los países ribereños –la tarjeta de visita dada a Ben Alí, a Mubarak o a Gadafi, la que hemos entregado a Mohamed VI– es que a la Unión Europea el desarrollo económico le importa poco. Lo que le importa son los grandes negocios."@pt17
"Señor Presidente, la posición de mi Grupo ya la ha fijado el señor Murphy en su intervención y yo creo, señor Presidente, que la Unión Europea no está para dar consejos a ninguna región del mundo en lo referente a cualquier modelo económico o comercial. No estamos para dar consejos, y mucho menos consejos sobre la base de la necesidad de desregular el mercado.
Ese principio, ese dogma, el «gran Dios» de la desregulación del mercado, que se ha aplicado con total rigidez en la Unión Europea, nos está llevando a la ruina en la Unión Europea y, por lo tanto, ese principio es un principio que no se debería plantear, y espero que los protagonistas de las revoluciones árabes no lo hagan suyo. No se trata de ir a tratados de libre comercio que no tengan en cuenta las asimetrías, ya que ello empobrecería más a esos pueblos.
Y mire usted, la tarjeta de visita que se entregó en su día a los países ribereños –la tarjeta de visita dada a Ben Alí, a Mubarak o a Gadafi, la que hemos entregado a Mohamed VI– es que a la Unión Europea el desarrollo económico le importa poco. Lo que le importa son los grandes negocios."@ro18
"Señor Presidente, la posición de mi Grupo ya la ha fijado el señor Murphy en su intervención y yo creo, señor Presidente, que la Unión Europea no está para dar consejos a ninguna región del mundo en lo referente a cualquier modelo económico o comercial. No estamos para dar consejos, y mucho menos consejos sobre la base de la necesidad de desregular el mercado.
Ese principio, ese dogma, el «gran Dios» de la desregulación del mercado, que se ha aplicado con total rigidez en la Unión Europea, nos está llevando a la ruina en la Unión Europea y, por lo tanto, ese principio es un principio que no se debería plantear, y espero que los protagonistas de las revoluciones árabes no lo hagan suyo. No se trata de ir a tratados de libre comercio que no tengan en cuenta las asimetrías, ya que ello empobrecería más a esos pueblos.
Y mire usted, la tarjeta de visita que se entregó en su día a los países ribereños –la tarjeta de visita dada a Ben Alí, a Mubarak o a Gadafi, la que hemos entregado a Mohamed VI– es que a la Unión Europea el desarrollo económico le importa poco. Lo que le importa son los grandes negocios."@sk19
"Señor Presidente, la posición de mi Grupo ya la ha fijado el señor Murphy en su intervención y yo creo, señor Presidente, que la Unión Europea no está para dar consejos a ninguna región del mundo en lo referente a cualquier modelo económico o comercial. No estamos para dar consejos, y mucho menos consejos sobre la base de la necesidad de desregular el mercado.
Ese principio, ese dogma, el «gran Dios» de la desregulación del mercado, que se ha aplicado con total rigidez en la Unión Europea, nos está llevando a la ruina en la Unión Europea y, por lo tanto, ese principio es un principio que no se debería plantear, y espero que los protagonistas de las revoluciones árabes no lo hagan suyo. No se trata de ir a tratados de libre comercio que no tengan en cuenta las asimetrías, ya que ello empobrecería más a esos pueblos.
Y mire usted, la tarjeta de visita que se entregó en su día a los países ribereños –la tarjeta de visita dada a Ben Alí, a Mubarak o a Gadafi, la que hemos entregado a Mohamed VI– es que a la Unión Europea el desarrollo económico le importa poco. Lo que le importa son los grandes negocios."@sl20
"Señor Presidente, la posición de mi Grupo ya la ha fijado el señor Murphy en su intervención y yo creo, señor Presidente, que la Unión Europea no está para dar consejos a ninguna región del mundo en lo referente a cualquier modelo económico o comercial. No estamos para dar consejos, y mucho menos consejos sobre la base de la necesidad de desregular el mercado.
Ese principio, ese dogma, el «gran Dios» de la desregulación del mercado, que se ha aplicado con total rigidez en la Unión Europea, nos está llevando a la ruina en la Unión Europea y, por lo tanto, ese principio es un principio que no se debería plantear, y espero que los protagonistas de las revoluciones árabes no lo hagan suyo. No se trata de ir a tratados de libre comercio que no tengan en cuenta las asimetrías, ya que ello empobrecería más a esos pueblos.
Y mire usted, la tarjeta de visita que se entregó en su día a los países ribereños –la tarjeta de visita dada a Ben Alí, a Mubarak o a Gadafi, la que hemos entregado a Mohamed VI– es que a la Unión Europea el desarrollo económico le importa poco. Lo que le importa son los grandes negocios."@sv22
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