Local view for "http://purl.org/linkedpolitics/eu/plenary/2005-12-14-Speech-3-080"

PredicateValue (sorted: default)
rdf:type
dcterms:Date
dcterms:Is Part Of
dcterms:Language
lpv:document identification number
"en.20051214.10.3-080"6
lpv:hasSubsequent
lpv:speaker
lpv:spoken text
"Señoras y señores, estimados colegas, me complace mucho recibir, en nombre de todos ustedes, en nombre de todos nosotros, a los dos galardonados del Premio Sájarov 2005 que otorga el Parlamento Europeo y a la representante del tercer galardonado. Todos los galardonados de este año tienen en común su lucha por la libertad y la dignidad humana. Son dignos sucesores del académico soviético que da nombre al premio que concede el Parlamento Europeo. Los tres, cada uno a su manera, simbolizan la lucha por la afirmación de los derechos humanos en el mundo. La lucha frente a los regímenes que encarcelan a los críticos que tienen la osadía de criticarles. La lucha frente a leyes inhumanas. La lucha frente a los que niegan el derecho a la información y en contra de los terroristas que quieren hundir el derecho a la información en las tinieblas. El Parlamento Europeo ha apoyado a nuestros galardonados de este año a través de sus resoluciones y de sus iniciativas. Son bien conocidos por nosotros. Hemos seguido su trabajo, hemos seguido su lucha. Su presencia aquí no es sino el final de un proceso que hemos compartido a través de nuestras resoluciones. Es una lucha por un mundo más democrático y más justo. Permítanme decir, desde esta alta tribuna, que muchos europeos consideran que el derecho al respeto de los derechos humanos es algo natural, consustancial, que prácticamente es gratuito y que siempre ha sido así. En efecto, a pesar de todas las gestiones efectuadas hasta el último momento, desgraciadamente, las «Damas de Blanco» no han sido autorizadas a salir de Cuba para estar hoy con nosotros. No, ni siempre ha sido así, ni es así todavía, desgraciadamente, en muchas partes del mundo. Para la gran mayoría de la humanidad todavía es un sueño lejano. Y por eso, a nosotros, europeos, nos corresponde una especial responsabilidad en la defensa y en la promoción de los derechos humanos en todo el mundo. Permítanme un breve glosa de nuestros galardonados: las «Damas de Blanco» están representadas por la señora Blanca Reyes, que también ha sido «Dama de Blanco» hasta que, afortunadamente para ella, dejó de serlo, puesto que se consiguió la liberación de su esposo, al que tuve el placer de recibir en su nombre en este Parlamento inmediatamente después de que saliera de la cárcel. Estas damas se manifiestan pacíficamente todas las semanas del año en La Habana, para expresar su solidaridad con familiares y amigos encarcelados, desde marzo del 2003. De alguna manera son también las continuadoras del fenómeno que se conoció en su día como las «Madres de la Plaza de Mayo» que también fueron galardonadas por nosotros. El delito de muchos de estos prisioneros, de estos presos, no es sino el de expresar públicamente su oposición al poder como simples ciudadanos, como periodistas independientes o como disidentes pacíficos. Muchos de ellos han caído gravemente enfermos durante su detención en condiciones que, sin duda, la señora Reyes nos explicará. Hemos pedido la liberación de estos prisioneros en abril del año 2004 y todavía, desgraciadamente, hace falta mucho para conseguirlo, a pesar de algunos casos individuales que se han producido. La experiencia de muchos de los países europeos nos enseña que la transición a la democracia, una transición pacífica a la democracia, no se prepara precisamente encarcelando a los disidentes, sino todo lo contrario. Ojalá que la transición a la democracia en Cuba tome buena nota de la experiencia de algunos países europeos. Señora Hauwa Ibrahim: Usted ha puesto su talento de abogada al servicio del Estado de Derecho. Su fuerza, como me decía al recibirla esta mañana, es el respeto de la Ley. Admiramos su determinación. Creo poder hablar en nombre de todo el Parlamento Europeo para lamentar y rechazar esta actitud de las autoridades cubanas. En este inmenso país que es Nigeria, usted defiende a las personas que viven bajo la amenaza de penas crueles e inhumanas. De penas que se aplican en virtud de la «Sharia» en doce Estados de su país. Usted lucha por el derecho de esas personas a un juicio justo, de acuerdo con la ley. Hemos seguido, créame, con indignada emoción los procesos incoados contra Amina Lawal y Safya Hussaini, acusadas de adulterio. Usted consiguió que triunfara la ley, exigiendo el respeto de la Constitución y de los Tratados internacionales firmados por Nigeria. Es inconcebible que todavía se pueda lapidar a una mujer acusada de adulterio; Es inconcebible que se pueda lapidar a una mujer acusada de adulterio como en los tiempos bíblicos; no se puede condenar a la amputación a jóvenes incriminados. En repetidas ocasiones, este Parlamento se ha expresado con firmeza contra esas penas inhumanas y contra la pena de muerte. Señora Ibrahim: somos sus aliados en el rechazo de esta crueldad y seremos intransigentes en este rechazo. Admiramos su compromiso personal. El compromiso personal que usted expresa con una fuerte convicción: la del derecho a la educación de los pobres, especialmente, de las mujeres, porque la pobreza se ceba especialmente en la mujer. Es usted un ejemplo para todas las nigerianas que quieren salir de la pobreza y la ignorancia. También recibimos hoy a Robert Ménard, conocido de esta casa, secretario general de Reporteros sin Fronteras, y, con él, a todos los periodistas. A unos profesionales que insuflan vida a la libertad de información, que nos abren los ojos a un mundo cruel. No puede haber democracia sin una información plural. La democracia es un sistema que tiene a la información como materia prima, como combustible primario. Sin él no puede haber democracia. Rendimos homenaje a los que luchan para hacer realidad todos los días, en todas las partes del mundo este principio. A aquellos que con demasiada frecuencia caen víctimas de la entrega apasionada a su profesión. Por desgracia, demasiado a menudo caen víctimas de la entrega apasionada a su profesión. Hace muy pocas semanas, a Robert Ménard le fue negada la autorización para acudir a la Cumbre de la Información que se celebraba en Túnez. Las autoridades tunecinas temían, sin duda, su testimonio. No deja de ser paradójico que esto ocurra precisamente cuando se habla del derecho al acceso a información libre para todos. Permítanme recordarles que en el año 2005, que ahora acaba, han perdido la vida 58 periodistas, uno cada semana del año, cada siete días muere un periodista en el ejercicio de sus funciones. En el 2004 fueron 53. Desgraciadamente, la cifra aumenta. Quiero rendir hoy homenaje a todos ellos, y a todos sus compañeros encarcelados o desaparecidos. Este Parlamento se ha movilizado y se movilizará siempre a su favor. Porque las dictaduras no duran eternamente. Algunas duran mucho, demasiado, pero no duran eternamente. Con sus actos crueles, tampoco los terroristas conseguirán suprimir la libertad de información, base imprescindible de nuestra vida democrática. En este momento solemne quiero recordar a las «Damas de Blanco» y las razones por las cuales han sido galardonadas por el Parlamento Europeo. Para terminar, y antes de dar la palabra a nuestros galardonados y a su representante quiero unir en una misma cita a Voltaire y a Brecht. Dos intelectuales separados por muchos años. Uno que abrió las luces y otro que sufrió las tinieblas. Voltaire y Brecht, los dos, coinciden en una expresión, que no sabría muy bien a quien atribuir prioritariamente. Lo dijeron en distintas épocas y distintos lugares y desde distintas situaciones. Insisto, uno abriendo la luz y otro soportando las tinieblas. Ambos dijeron que la libertad de expresión es el único derecho que separa la libertad de la tiranía. Y no aceptarlo es condenar al ser humano en el oprobio. Enhorabuena a nuestros galardonados por el coraje que han demostrado. Voltaire y Brecht nos están observando Muchas gracias. Señora Blanca Reyes, tiene usted la palabra. Desgraciadamente no es la primera vez que ocurre, ni Nelson Mandela, ni Aung San Suu Kyi, ni Leyla Zana, ni Wei Jingshen pudieron acudir en su día a recoger su premio. Sus representantes acudieron aquí para hacerlo. Y cuando pudieron hacerlo, y algunos todavía no han podido porque siguen detenidos, vinieron a la Cámara y nos reunimos expresamente para escucharles. Este fue el caso de Nelson Mandela y, más recientemente, de Leyla Zana. Por lo tanto, seguiremos haciendo toda la presión sobre las autoridades cubanas para que puedan venir, y cuando vengan organizaremos, como hemos hecho en otras ocasiones, una sesión solemne para que puedan dirigirse a nuestro Pleno y haremos lo posible para que esto sea cuanto antes."@es20
lpv:spokenAs
lpv:translated text
"Señoras y señores, estimados colegas, me complace mucho recibir, en nombre de todos ustedes, en nombre de todos nosotros, a los dos galardonados del Premio Sájarov 2005 que otorga el Parlamento Europeo y a la representante del tercer galardonado. Todos los galardonados de este año tienen en común su lucha por la libertad y la dignidad humana. Son dignos sucesores del académico soviético que da nombre al premio que concede el Parlamento Europeo. Los tres, cada uno a su manera, simbolizan la lucha por la afirmación de los derechos humanos en el mundo. La lucha frente a los regímenes que encarcelan a los críticos que tienen la osadía de criticarles. La lucha frente a leyes inhumanas. La lucha frente a los que niegan el derecho a la información y en contra de los terroristas que quieren hundir el derecho a la información en las tinieblas. El Parlamento Europeo ha apoyado a nuestros galardonados de este año a través de sus resoluciones y de sus iniciativas. Son bien conocidos por nosotros. Hemos seguido su trabajo, hemos seguido su lucha. Su presencia aquí no es sino el final de un proceso que hemos compartido a través de nuestras resoluciones. Es una lucha por un mundo más democrático y más justo. Permítanme decir, desde esta alta tribuna, que muchos europeos consideran que el derecho al respeto de los derechos humanos es algo natural, consustancial, que prácticamente es gratuito y que siempre ha sido así. En efecto, a pesar de todas las gestiones efectuadas hasta el último momento, desgraciadamente, las «Damas de Blanco» no han sido autorizadas a salir de Cuba para estar hoy con nosotros. No, ni siempre ha sido así, ni es así todavía, desgraciadamente, en muchas partes del mundo. Para la gran mayoría de la humanidad todavía es un sueño lejano. Y por eso, a nosotros, europeos, nos corresponde una especial responsabilidad en la defensa y en la promoción de los derechos humanos en todo el mundo. Permítanme un breve glosa de nuestros galardonados: las «Damas de Blanco» están representadas por la señora Blanca Reyes, que también ha sido «Dama de Blanco» hasta que, afortunadamente para ella, dejó de serlo, puesto que se consiguió la liberación de su esposo, al que tuve el placer de recibir en su nombre en este Parlamento inmediatamente después de que saliera de la cárcel. Estas damas se manifiestan pacíficamente todas las semanas del año en La Habana, para expresar su solidaridad con familiares y amigos encarcelados, desde marzo del 2003. De alguna manera son también las continuadoras del fenómeno que se conoció en su día como las «Madres de la Plaza de Mayo» que también fueron galardonadas por nosotros. El delito de muchos de estos prisioneros, de estos presos, no es sino el de expresar públicamente su oposición al poder como simples ciudadanos, como periodistas independientes o como disidentes pacíficos. Muchos de ellos han caído gravemente enfermos durante su detención en condiciones que, sin duda, la señora Reyes nos explicará. Hemos pedido la liberación de estos prisioneros en abril del año 2004 y todavía, desgraciadamente, hace falta mucho para conseguirlo, a pesar de algunos casos individuales que se han producido. La experiencia de muchos de los países europeos nos enseña que la transición a la democracia, una transición pacífica a la democracia, no se prepara precisamente encarcelando a los disidentes, sino todo lo contrario. Ojalá que la transición a la democracia en Cuba tome buena nota de la experiencia de algunos países europeos. Señora Hauwa Ibrahim: Usted ha puesto su talento de abogada al servicio del Estado de Derecho. Su fuerza, como me decía al recibirla esta mañana, es el respeto de la Ley. Admiramos su determinación. Creo poder hablar en nombre de todo el Parlamento Europeo para lamentar y rechazar esta actitud de las autoridades cubanas. En este inmenso país que es Nigeria, usted defiende a las personas que viven bajo la amenaza de penas crueles e inhumanas. De penas que se aplican en virtud de la «Sharia» en doce Estados de su país. Usted lucha por el derecho de esas personas a un juicio justo, de acuerdo con la ley. Hemos seguido, créame, con indignada emoción los procesos incoados contra Amina Lawal y Safya Hussaini, acusadas de adulterio. Usted consiguió que triunfara la ley, exigiendo el respeto de la Constitución y de los Tratados internacionales firmados por Nigeria. Es inconcebible que todavía se pueda lapidar a una mujer acusada de adulterio; Es inconcebible que se pueda lapidar a una mujer acusada de adulterio como en los tiempos bíblicos; no se puede condenar a la amputación a jóvenes incriminados. En repetidas ocasiones, este Parlamento se ha expresado con firmeza contra esas penas inhumanas y contra la pena de muerte. Señora Ibrahim: somos sus aliados en el rechazo de esta crueldad y seremos intransigentes en este rechazo. Admiramos su compromiso personal. El compromiso personal que usted expresa con una fuerte convicción: la del derecho a la educación de los pobres, especialmente, de las mujeres, porque la pobreza se ceba especialmente en la mujer. Es usted un ejemplo para todas las nigerianas que quieren salir de la pobreza y la ignorancia. También recibimos hoy a Robert Ménard, conocido de esta casa, secretario general de Reporteros sin Fronteras, y, con él, a todos los periodistas. A unos profesionales que insuflan vida a la libertad de información, que nos abren los ojos a un mundo cruel. No puede haber democracia sin una información plural. La democracia es un sistema que tiene a la información como materia prima, como combustible primario. Sin él no puede haber democracia. Rendimos homenaje a los que luchan para hacer realidad todos los días, en todas las partes del mundo este principio. A aquellos que con demasiada frecuencia caen víctimas de la entrega apasionada a su profesión. Por desgracia, demasiado a menudo caen víctimas de la entrega apasionada a su profesión. Hace muy pocas semanas, a Robert Ménard le fue negada la autorización para acudir a la Cumbre de la Información que se celebraba en Túnez. Las autoridades tunecinas temían, sin duda, su testimonio. No deja de ser paradójico que esto ocurra precisamente cuando se habla del derecho al acceso a información libre para todos. Permítanme recordarles que en el año 2005, que ahora acaba, han perdido la vida 58 periodistas, uno cada semana del año, cada siete días muere un periodista en el ejercicio de sus funciones. En el 2004 fueron 53. Desgraciadamente, la cifra aumenta. Quiero rendir hoy homenaje a todos ellos, y a todos sus compañeros encarcelados o desaparecidos. Este Parlamento se ha movilizado y se movilizará siempre a su favor. Porque las dictaduras no duran eternamente. Algunas duran mucho, demasiado, pero no duran eternamente. Con sus actos crueles, tampoco los terroristas conseguirán suprimir la libertad de información, base imprescindible de nuestra vida democrática. En este momento solemne quiero recordar a las «Damas de Blanco» y las razones por las cuales han sido galardonadas por el Parlamento Europeo. Para terminar, y antes de dar la palabra a nuestros galardonados y a su representante quiero unir en una misma cita a Voltaire y a Brecht. Dos intelectuales separados por muchos años. Uno que abrió las luces y otro que sufrió las tinieblas. Voltaire y Brecht, los dos, coinciden en una expresión, que no sabría muy bien a quien atribuir prioritariamente. Lo dijeron en distintas épocas y distintos lugares y desde distintas situaciones. Insisto, uno abriendo la luz y otro soportando las tinieblas. Ambos dijeron que la libertad de expresión es el único derecho que separa la libertad de la tiranía. Y no aceptarlo es condenar al ser humano en el oprobio. Enhorabuena a nuestros galardonados por el coraje que han demostrado. Voltaire y Brecht nos están observando Muchas gracias. Señora Blanca Reyes, tiene usted la palabra. Desgraciadamente no es la primera vez que ocurre, ni Nelson Mandela, ni Aung San Suu Kyi, ni Leyla Zana, ni Wei Jingshen pudieron acudir en su día a recoger su premio. Sus representantes acudieron aquí para hacerlo. Y cuando pudieron hacerlo, y algunos todavía no han podido porque siguen detenidos, vinieron a la Cámara y nos reunimos expresamente para escucharles. Este fue el caso de Nelson Mandela y, más recientemente, de Leyla Zana. Por lo tanto, seguiremos haciendo toda la presión sobre las autoridades cubanas para que puedan venir, y cuando vengan organizaremos, como hemos hecho en otras ocasiones, una sesión solemne para que puedan dirigirse a nuestro Pleno y haremos lo posible para que esto sea cuanto antes."@cs1
"Mine damer og herrer, det glæder mig meget på alles vegne at byde velkommen til de to modtagere af Sakharov-prisen 2005, som uddeles af Europa-Parlamentet, og til repræsentanten for den tredje prismodtager. Alle årets prismodtagere har det til fælles, at de kæmper for friheden og den menneskelige værdighed. De er værdige afløsere for den sovjetiske akademiker, der har lagt navn til den pris, som Europa-Parlamentet uddeler. Alle tre symboliserer hver på sin måde kampen for at forsvare menneskerettighederne i verden. Kampen mod styrer, der arresterer de kritikere, der vover at kritisere dem. Kampen mod umenneskelige love. Kampen mod dem, der nægter retten til information, og mod de terrorister, der ønsker at fratage os retten til information. Europa-Parlamentet har støttet årets prismodtagere ved hjælp af dets beslutninger og initiativer. Vi kender dem vældig godt. Vi har fulgt deres arbejde og deres kamp. Deres tilstedeværelse her er blot afslutningen på en proces, som vi har været fælles om via vores beslutninger. Det er en kamp for en mere demokratisk og mere retfærdig verden. Lad mig fra denne høje talerstol sige, at mange europæere mener, at retten til respekten for menneskerettighederne er noget naturligt og uundgåeligt, der er praktisk taget gratis, og at det altid har været sådan. Til trods for alle de tiltag, der er blevet gjort indtil sidste øjeblik, har "Kvinder i hvidt" ikke fået udrejsetilladelse fra Cuba for at være her i dag sammen med os. Nej, det har ikke altid været sådan, og det er desværre ikke altid sådan mange steder i verden. For størstedelen af menneskeheden er det stadig en fjern drøm. Og derfor har vi europæere et særligt ansvar for at forsvare og fremme menneskerettighederne i hele verden. Lad mig komme med en kort beskrivelse af vores prismodtagere. "Kvinder i hvidt" er repræsenteret ved fru Blanca Reyes, som også har været en "Kvinde i hvidt", indtil hun heldigvis holdt op med at være det, da hendes mand blev frigivet, og som jeg havde den fornøjelse at modtage her i Parlamentet umiddelbart efter, at han kom ud af fængslet. Disse kvinder har siden 2003 demonstreret fredeligt hver eneste uge året rundt i Havanna for at give udtryk for deres solidaritet med de fængslede familiemedlemmer og venner. På sin vis har de fortsat det fænomen, som i sin tid blev kendt som "Plaza de Mayo-mødrene", der også modtog vores pris. Mange af disse fangers forbrydelse består blot i, at de offentligt har givet udtrykt for deres modstand mod regeringen, som almindelige borgere, som uafhængige journalister eller som fredelige dissidenter. Mange af dem er blevet alvorligt syge under deres fængselsophold under nogle betingelser, som fru Reyes utvivlsomt vil fortælle os mere om. Vi anmodede om frigivelse af disse fanger i april 2004, men der er desværre lang vej endnu, før vi opnår det, til trods for enkelte tilfælde hvor en fange er blevet frigivet. Erfaringerne fra mange europæiske lande har vist os, at overgangen til demokrati, en fredelig overgang til demokrati, ikke skal forberedes med fængsling af dissidenter, tværtimod. Lad os håbe, at overgangen til demokrati i Cuba tager ved lære af erfaringen fra visse europæiske lande. Fru Hauwa Ibrahim: De har brugt Deres talent som advokat i retsstatens tjeneste. Deres styrke er, som De fortalte mig, da jeg modtog Dem i formiddags, respekten for loven. Vi beundrer Deres beslutsomhed. Jeg tror, at jeg taler på hele Europa-Parlamentets vegne, når jeg beklager og forkaster de cubanske myndigheders holdning. I Nigeria, dette kæmpestore land, forsvarer De de personer, der lever med en trussel om grusomme og umenneskelige straffe. Der idømmes straffe i henhold til sharialovgivningen i 12 stater i Deres land. De kæmper for disse personers ret til en retfærdig rettergang i henhold til loven. Tro mig, når jeg siger, at vi følte os harmfulde og bevægede, da vi fulgte sagerne mod Amina Lawal og Safya Hussaini, der var anklaget for ægteskabsbrud. Det lykkedes Dem at få loven til at gælde ved at kræve respekt for forfatningen og de internationale traktater, som Nigeria har undertegnet. Det er ufatteligt, at man stadig kan stene en kvinde, der beskyldes for ægteskabsbrud. Det er ufatteligt, at man kan stene en kvinde, der er beskyldt for ægteskabsbrud som i de bibelske tider. Man kan ikke dømme unge anklagede til amputation. Europa-Parlamentet har ved flere lejligheder givet kraftigt udtryk for sin fordømmelse af disse umenneskelige straffe og dødsstraffen. Fru Ibrahim, vi står på Deres side i afvisningen af denne grusomhed, og vores afvisning er total. Vi beundrer Deres personlige engagement. Det personlige engagement, som De giver udtryk for med stærk overbevisning, nemlig retten til uddannelse af de fattige, især af kvinderne, for fattigdommen går især ud over kvinder. De er et eksempel for alle nigerianske kvinder, der ønsker at komme ud af fattigdommen og uvidenheden. I dag byder vi også velkommen til Robert Ménard, der er velkendt af Parlamentet, og som er generalsekretær for Journalister uden Grænser, og via ham byder vi også velkommen til alle journalisterne. Disse fagfolk puster liv i informationsfriheden og åbner vores øjne for en grusom verden. Demokrati uden pluralistisk information er ikke muligt. Demokrati er en styreform, hvor informationsfriheden er råmaterialet, det vigtigste brændstof. Uden informationsfrihed er der ikke noget demokrati. Vi hylder dem, der hver eneste dag kæmper for at virkeliggøre dette princip verden over. Vi hylder dem, der alt for ofte bliver ofre for deres lidenskabelige pligtopfyldelse. Desværre bliver de ofte ofre for denne lidenskabelige pligtopfyldelse. For et par uger siden fik Robert Ménard afslag på sin ansøgning om at kunne deltage i det informationstopmøde, der blev afholdt i Tunesien. De tunesiske myndigheder var uden tvivl bange for, hvad han ville sige. Dette sker paradoksalt nok, samtidig med at man taler om fri adgang til information for alle mennesker. Lad mig minde Dem om, at der i 2005, der løber ud nu, er 58 journalister, der har mistet livet, en journalist om ugen hele året rundt, hver syvende dag dør der en journalist i forbindelse med udførelsen af hans eller hendes job. I 2004 drejede det sig om 53, så tallet vokser desværre. Jeg vil i dag gerne hylde alle disse og alle deres fængslede eller forsvundne kolleger. Europa-Parlamentet har handlet, og det vil altid handle for deres skyld. For diktaturer varer ikke evigt. Nogle varer i lang tid, for lang tid, men de varer ikke evigt. Til trods for deres grusomme handlinger formår terroristerne heller ikke at undertrykke informationsfriheden, det ufravigelige grundlag for vores demokratiske liv. Ved denne højtidelige lejlighed vil jeg gerne minde om årsagerne til, at "Kvinder i hvidt" har modtaget Europa-Parlamentets pris. Som afslutning, og før jeg giver ordet til vores prismodtagere og deres repræsentanter, vil jeg gerne forene Voltaires og Brechts tanker. De er to intellektuelle med mange år imellem sig. Den ene åbnede for lyset, og den anden led i mørket. Både Voltaire og Brecht har brugt et udtryk, som jeg ikke ved, hvem jeg først og fremmest skal give æren for. De sagde det i forskellige tidsaldre og på forskellige steder og i forskellige situationer. Jeg gentager, at den ene åbnede for lyset, og at den anden led i mørket. De sagde begge, at ytringsfriheden er den eneste rettighed, der adskiller friheden fra tyranni. Hvis man ikke accepterer det, dømmer man mennesket til skændsel. Tillykke til vores prismodtagere for det mod, de har udvist. Voltaire og Brecht betragter os. Mange tak. Fru Blanca Reyes, jeg giver Dem ordet. Det er desværre ikke første gang, det sker. Hverken Nelson Mandela eller Aung San Suu Kyi, Leyla Zana eller Wei Jingshen kunne i sin tid komme til stede og modtage deres pris. I stedet modtog deres repræsentanter prisen. Og når det blev muligt at gøre det, og der er stadig nogle, der ikke har kunnet gøre det, fordi de er arresterede, kom de her til Parlamentet, og vi samledes specielt for at lytte til dem. Det var tilfældet med Nelson Mandela og for nylig med Leyla Zana. Derfor vil vi fortsat lægge pres på de cubanske myndigheder, så de får lov til at komme, og når de kommer, vil vi, som vi har gjort det ved andre lejligheder, afholde et højtideligt møde, så de kan tale til Parlamentet, og vi vil gøre vores til, at det sker hurtigst muligt."@da2
"Meine Damen und Herren! Ich freue mich sehr, in Ihrer aller Namen, in unser aller Namen, zwei Träger des Sacharow-Preises 2005 des Europäischen Parlaments und die Vertreterin des dritten Preisträgers willkommen zu heißen. Allen Preisträgern dieses Jahres ist ihr Kampf für Menschenwürde und Freiheit gemein. Sie sind würdige Nachfolger des sowjetischen Wissenschaftlers, dessen Name der vom Europäischen Parlament verliehene Preis trägt. Auf unterschiedliche Weise symbolisieren alle drei den Kampf für die Festigung der Menschenrechte in der Welt. Den Kampf gegen Regime, die jene Kritiker ins Gefängnis werfen, die es wagen, sie zu kritisieren. Den Kampf gegen Menschen verachtende Gesetze. Den Kampf gegen jene, die das Recht auf Information verweigern, und gegen die Terroristen, die das Recht auf Information mit einem Bann belegen wollen. Das Europäische Parlament hat die diesjährigen Preisträger mit seinen Entschließungen und seinen Initiativen unterstützt. Sie sind uns wohlbekannt. Wir haben ihre Arbeit, wir haben ihren Kampf verfolgt. Ihre Anwesenheit hier ist nur das Ende eines Prozesses, an dem wir mit unseren Entschließungen teilhatten. Es ist ein Kampf für eine demokratischere und gerechtere Welt. Bitte gestatten Sie mir, hier in diesem angesehenen Haus darauf hinzuweisen, dass viele Europäer glauben, das Recht auf Achtung der Menschenrechte sei etwas Naturgegebenes, etwas Zwangsläufiges, das praktisch kostenlos zu haben ist, und dies sei immer so gewesen. Bedauerlicherweise erhielten die „Damen in Weiß“ trotz aller bis zur letzten Minute unternommenen Bemühungen nicht die Genehmigung zur Ausreise aus Kuba, um heute bei uns zu sein. Nein, das ist nicht immer so gewesen, und es ist leider in vielen Teilen der Welt auch heute noch nicht der Fall. Für die große Mehrheit der Menschheit ist es noch ein ferner Traum. Und aus diesem Grund haben wir Europäer eine besondere Verpflichtung zur Verteidigung und zur Förderung der Menschenrechte in der Welt. Ich möchte kurz über jeden unserer Preisträger sprechen: Die „Damen in Weiß“ werden durch Frau Blanca Reyes vertreten, die ebenfalls eine „Dame in Weiß“ war, bis sie es zu ihrem Glück nicht mehr war, da ihr Ehemanns freigelassen wurde, den in Ihrem Namen unmittelbar nach seiner Haftentlassung in diesem Parlament zu empfangen ich die Freude hatte. Diese Damen demonstrieren seit März 2003 jede Woche friedlich in Havanna, um ihre Solidarität mit inhaftierten Familienangehörigen und Freunden zum Ausdruck zu bringen. In gewisser Weise sind sie auch eine Fortsetzung der damaligen „Mütter der Plaza de Mayo“, die wir ebenfalls mit einem Preis geehrt haben. Das einzige Verbrechen vieler dieser Gefangenen besteht darin, dass sie als einfache Bürger, unabhängige Journalisten oder friedliche Dissidenten öffentlich ihre Opposition zur Regierung bekundet haben. Viele von ihnen sind während der Haft unter Bedingungen, die uns Frau Reyes sicher erläutern wird, schwer erkrankt. Wir haben im April 2004 die Freilassung dieser Gefangenen gefordert, und leider sind wir, trotz einiger Einzelfälle, noch weit von diesem Ziel entfernt. Die Erfahrung vieler europäischer Länder zeigt uns, dass es nicht möglich ist, die Bedingungen für einen Übergang zur Demokratie, einen friedlichen Übergang zur Demokratie zu schaffen, indem man Dissidenten ins Gefängnis wirft. Ganz im Gegenteil. Lassen Sie uns hoffen, dass beim Übergang zur Demokratie in Kuba die Erfahrungen bestimmter europäischer Länder beachtet werden. Frau Hauwa Ibrahim Sie haben Ihre Talente als Anwältin in den Dienst der Rechtsstaatlichkeit gestellt. Ihre Stärke liegt, wie Sie mir sagten, als ich Sie heute Vormittag empfing, in der Achtung des Gesetzes. Wir bewundern Ihre Entschlossenheit. Im Namen des gesamten Europäischen Parlaments denke ich sagen zu können, dass wir dieses Verhalten der kubanischen Behörden bedauern und ablehnen. In diesem riesigen Land Nigeria verteidigen Sie Menschen, die unter der Androhung grausamer und unmenschlicher Strafen leben. Strafen, die nach der Sharia in zwölf Bundesstaaten Ihres Landes angewendet werden. Sie kämpfen für das Recht dieser Menschen auf ein faires Verfahren im Einklang mit dem Gesetz. Bitte glauben Sie mir, dass wir bewegt und empört die Prozesse gegen Amina Lawal und Safya Hussaini verfolgt haben, die des Ehebruchs angeklagt waren. Sie haben dem Recht zum Sieg verholfen, indem Sie die Einhaltung der Verfassung und der von Nigeria unterzeichneten internationalen Abkommen forderten. Es ist unvorstellbar, dass eine des Ehebruchs angeklagte Frau immer noch gesteinigt werden darf. Es ist unvorstellbar, dass eine des Ehebruchs angeklagte Frau wie in biblischen Zeiten gesteinigt werden darf; wir dürfen die Amputation jugendlicher Straftäter nicht stillschweigend dulden. Dieses Parlament hat sich wiederholt gegen diese unmenschlichen Strafen und gegen die Todesstrafe ausgesprochen. Frau Ibrahim, wir stehen an Ihrer Seite bei der Ablehnung dieser Grausamkeit, und wir sind unnachgiebig in dieser Ablehnung. Wir bewundern Ihr persönliches Engagement. Das persönliche Engagement, das Sie mit starker Überzeugung zum Ausdruck bringen: der Überzeugung vom Recht auf Bildung für die Armen, insbesondere die Frauen, weil die Armut die Frauen besonders trifft. Sie sind ein Beispiel für alle Nigerianer, die Armut und Unwissenheit überwinden wollen. Wir empfangen heute auch Robert Ménard, den Generalsekretär von Reporter ohne Grenzen, der diesem Haus gut bekannt ist, und mit ihm alle Journalisten. Die Angehörigen dieser Berufsgruppe erfüllen die Informationsfreiheit mit Leben und öffnen uns die Augen für eine grausame Welt. Ohne pluralistische Information kann es keine Demokratie geben. Die Information ist der Rohstoff, der Haupttreibstoff des Systems der Demokratie. Ohne ihn kann es keine Demokratie geben. Wir ehren jene, die Tag für Tag überall in der Welt dafür kämpfen, dass dieses Prinzip Wirklichkeit wird. Wir ehren jene, die allzu oft Opfer der leidenschaftlichen Erfüllung ihrer Aufgaben werden. Leider werden sie allzu oft Opfer der leidenschaftlichen Erfüllung ihrer Aufgaben. Vor wenigen Wochen wurde Robert Ménard die Genehmigung zur Teilnahme am Informationsgipfel von Tunis verweigert. Zweifellos fürchteten sich die tunesischen Behörden vor dem, was er hätte sagen wollen. Es ist wirklich paradox, dass dies gerade dann geschah, als wir über das Recht auf freien Zugang zu Informationen für jedermann sprachen. Ich möchte Sie daran erinnern, dass in diesem jetzt zu Ende gehenden Jahr 58 Journalisten ihr Leben verloren haben, einer pro Woche, alle sieben Tage kommt ein Journalist bei der Ausübung seines Berufs ums Leben. 2004 waren es 53. Leider ist die Zahl im Steigen begriffen. Ich möchte heute ihnen allen sowie allen ihren inhaftierten oder verschwundenen Kollegen Achtung bezeugen. Dieses Parlament hat sie stets mit Taten unterstützt und wird das auch weiterhin tun. Denn Diktaturen bestehen nicht ewig. Einige bestehen lange, zu lange, aber sie bestehen nicht ewig. Auch den Terroristen wird es mit ihren brutalen Aktionen nicht gelingen, die Informationsfreiheit, die unverzichtbare Grundlage unseres demokratischen Lebens, zu unterdrücken. Bei dieser offiziellen Gelegenheit möchte ich über die „Damen in Weiß“ sprechen und darlegen, was uns bewogen hat, ihnen diesen Preis zu verleihen. Abschließend, und bevor ich unseren Preisträgern und ihren Vertretern das Wort erteile, möchte ich die Gedanken von Voltaire und Brecht miteinander verbinden, von zwei durch viele Jahre voneinander getrennten Intellektuellen. Der eine brachte das Licht, und der andere litt in der Finsternis. Beide, Voltaire und Brecht, verwendeten denselben Ausdruck, und ich bin nicht ganz sicher, wem er am ehesten zugeschrieben werden sollte. Sie verwendeten ihn in verschiedenen Epochen, an verschiedenen Orten und unter verschiedenen Umständen. Ich möchte betonen, einer von ihnen brachte das Licht, und der andere ertrug die Finsternis. Beide sagten, dass die freie Meinungsäußerung das einzige Recht sei, das die Freiheit von der Tyrannei unterscheidet. Und dies nicht zu akzeptieren bedeutet, den Menschen zur Schmach zu verdammen. Glückwunsch an unsere Preisträger für den von ihnen bewiesenen Mut. Voltaire und Brecht schauen auf uns. Vielen Dank. Frau Blanca Reyes, Sie haben das Wort. Es ist leider nicht das erste Mal, dass dies geschieht. Weder Nelson Mandela, Aung San Suu Kyi, Leyla Zana noch Wei Jingshen konnten anreisen, um ihren Preis in Empfang zu nehmen. An ihrer Stelle kamen ihre Vertreter. Sobald es ihnen möglich war – einige konnten es bis heute nicht, weil sie sich weiterhin in Haft befinden –, kamen sie zu uns ins Parlament, und wir versammelten uns aus besonderem Anlass, um ihnen zuzuhören. Das war so im Fall von Nelson Mandela und vor kurzem von Leyla Zana. Deshalb werden wir weiter jeden nur möglichen Druck auf die kubanischen Behörden ausüben, damit ihnen die Ausreise genehmigt wird, und wenn sie kommen, werden wir eine feierliche Sitzung anberaumen, wie wir es bei anderen Anlässen getan haben, um ihnen Gelegenheit zu geben, zu unserem Haus zu sprechen, und wir werden alles in unseren Kräften Stehende tun, damit dies baldmöglichst geschieht."@de9
"Κυρίες και κύριοι, έχω τη χαρά να καλωσορίσω, εξ ονόματος όλων σας, εξ ονόματος όλων μας, τους δύο νικητές του Βραβείου Ζαχάρωφ 2005 του Ευρωπαϊκού Κοινοβουλίου και την εκπρόσωπο του τρίτου νικητή. Αυτό που έχουν κοινό όλοι οι φετινοί βραβευθέντες είναι ο αγώνας τους για την ανθρώπινη αξιοπρέπεια και την ελευθερία. Είναι άξιοι συνεχιστές του σοβιετικού ακαδημαϊκού το όνομα του οποίου φέρει το βραβείο που απονέμει το Ευρωπαϊκό Κοινοβούλιο. Και οι τρεις, ο καθένας με τον τρόπο του, συμβολίζουν τον αγώνα για την εδραίωση των ανθρωπίνων δικαιωμάτων στον κόσμο. Τον αγώνα εναντίον καθεστώτων που φυλακίζουν όσους τολμούν να τα επικρίνουν. Τον αγώνα εναντίον απάνθρωπων νόμων. Τον αγώνα εναντίον εκείνων που αρνούνται το δικαίωμα στην ενημέρωση και εναντίον των τρομοκρατών που θέλουν να καταργήσουν το δικαίωμα στην ενημέρωση. Το Ευρωπαϊκό Κοινοβούλιο έχει στηρίξει τους φετινούς βραβευθέντες μέσω των ψηφισμάτων του και των πρωτοβουλιών του. Μας είναι πολύ γνωστοί. Έχουμε παρακολουθήσει το έργο τους, έχουμε παρακολουθήσει τον αγώνα τους. Η παρουσία τους εδώ είναι μόνο το τέλος μιας διαδικασίας στην οποία έχουμε συμμετάσχει μέσω των ψηφισμάτων μας. Είναι ένας αγώνας για έναν πιο δημοκρατικό και πιο δίκαιο κόσμο. Παρακαλώ, επιτρέψτε μου να επισημάνω, εδώ σε αυτή την αξιοσέβαστη Αίθουσα, ότι πολλοί Ευρωπαίοι πιστεύουν ότι το δικαίωμα του σεβασμού των ανθρωπίνων δικαιωμάτων είναι κάτι φυσικό, κάτι δεδομένο, το οποίο δικαιούνται χωρίς κανένα αντάλλαγμα, και ότι αυτό ίσχυε πάντα. Δυστυχώς, παρά τις προσπάθειες που καταβάλλονταν μέχρι την τελευταία στιγμή, δεν δόθηκε άδεια στις «Κυρίες στα Λευκά» να ταξιδέψουν από την Κούβα για να είναι μαζί μας σήμερα. Όχι, δεν ίσχυε πάντα, και δυστυχώς δεν ισχύει ακόμη σε πολλές περιοχές του κόσμου. Για τη μεγάλη πλειοψηφία της ανθρωπότητας είναι ακόμη ένα μακρινό όνειρο. Και για αυτόν τον λόγο, εμείς οι Ευρωπαίοι έχουμε ένα ιδιαίτερο καθήκον να υπερασπιζόμαστε και να προωθούμε τα ανθρώπινα δικαιώματα στον κόσμο. Θα ήθελα να μιλήσω εν συντομία για καθέναν από τους βραβευθέντες: οι «Κυρίες στα Λευκά» εκπροσωπούνται από την κ. Μπλάνκα Ρέγιες, η οποία ήταν μία «Κυρία στα Λευκά» μέχρι που ευτυχώς σταμάτησε να είναι όταν ο σύζυγός της, τον οποίο είχα τη χαρά να υποδεχτώ εξ ονόματός σας σε αυτό το Κοινοβούλιο αμέσως μετά την αποφυλάκισή του, αφέθηκε ελεύθερος. Αυτές οι γυναίκες διαδηλώνουν ειρηνικά κάθε εβδομάδα στην Αβάνα για να εκφράσουν την αλληλεγγύη τους προς τους συγγενείς και φίλους που βρίσκονται στη φυλακή από τον Μάρτιο του 2003. Σε κάποιο βαθμό συνεχίζουν επίσης το φαινόμενο που ήταν γνωστό τότε ως οι «Μητέρες της Πλατείας του Μαΐου», στις οποίες επίσης απονείμαμε βραβείο. Το μοναδικό έγκλημα πολλών από αυτούς τους κρατούμενους είναι ότι εξέφρασαν δημόσια την αντίθεσή τους στην κυβέρνηση ως απλοί πολίτες, ως ανεξάρτητοι δημοσιογράφοι ή ως ειρηνικοί αντιφρονούντες. Πολλοί από αυτούς έχουν αρρωστήσει σοβαρά κατά τη διάρκεια της φυλάκισής τους σε συνθήκες που αναμφίβολα θα μας περιγράψει η κ. Ρέγιες. Ζητήσαμε την απελευθέρωση αυτών των κρατουμένων τον Απρίλιο του 2004 και δυστυχώς, μέχρι στιγμής, αυτό δεν έχει επιτευχθεί, παρά την εξαίρεση ορισμένων ατομικών περιπτώσεων. Η εμπειρία πολλών ευρωπαϊκών χωρών μας δείχνει ότι δεν είναι δυνατό να εδραιωθούν οι συνθήκες για τη μετάβαση στη δημοκρατία, μια ειρηνική μετάβαση στη δημοκρατία, φυλακίζοντας τους αντιφρονούντες, ακριβώς το αντίθετο. Ας ελπίσουμε ότι η μετάβαση στη δημοκρατία στην Κούβα θα λάβει υπόψη την εμπειρία ορισμένων ευρωπαϊκών χωρών. Κυρία Χάουα Ιμπραΐμ: Χρησιμοποιήσατε τα ταλέντα σας ως δικηγόρος για να προωθήσετε το κράτος δικαίου. Η δύναμή σας, όπως μου είπατε όταν σας υποδέχτηκα σήμερα το πρωί, έγκειται στον σεβασμό του νόμου. Θαυμάζουμε την αποφασιστικότητά σας. Πιστεύω ότι μπορώ να πω, εξ ονόματος όλου του Ευρωπαϊκού Κοινοβουλίου, ότι λυπόμαστε και καταδικάζουμε αυτή τη στάση των κουβανικών αρχών. Σε αυτή την τεράστια χώρα της Νιγηρίας, υπερασπίζεστε ανθρώπους που ζουν υπό την απειλή σκληρών και απάνθρωπων ποινών. Ποινών που εφαρμόζονται σύμφωνα με τον νόμο της Σαρία σε δώδεκα επαρχίες της χώρας σας. Αγωνίζεστε για το δικαίωμα αυτών των ανθρώπων για μια δίκαιη δίκη, σύμφωνα με τον νόμο. Παρακαλώ πιστέψτε με ότι νιώσαμε συγκίνηση και αγανάκτηση παρακολουθώντας τις δίκες της Αμινά Λαουάλ και της Σάφια Χουσαϊνί, οι οποίες κατηγορήθηκαν για μοιχεία. Εσείς φροντίσατε να θριαμβεύσει ο νόμος, απαιτώντας τον σεβασμό του Συντάγματος και των διεθνών συνθηκών που έχει υπογράψει η Νιγηρία. Είναι αδιανόητο μία γυναίκα που κατηγορείται για μοιχεία να μπορεί ακόμη να λιθοβολείται. Είναι αδιανόητο μία γυναίκα που κατηγορείται για μοιχεία να λιθοβολείται όπως στους βιβλικούς χρόνους· δεν μπορούμε να συγχωρήσουμε τον ακρωτηριασμό νεαρών εγκληματιών. Αυτό το Κοινοβούλιο έχει μιλήσει κατηγορηματικά εναντίον αυτών των απάνθρωπων ποινών και κατά της θανατικής ποινής σε πολλές περιπτώσεις. Κυρία Ιμπραΐμ, στεκόμαστε στο πλευρό σας καταδικάζοντας αυτή τη σκληρότητα και θα είμαστε απόλυτοι σε αυτή την καταδίκη. Θαυμάζουμε την προσωπική σας δέσμευση. Την προσωπική δέσμευση που εκφράζετε με μεγάλη πεποίθηση: για το δικαίωμα των φτωχών στην εκπαίδευση, ιδιαίτερα των γυναικών, διότι η φτώχεια πλήττει ιδιαίτερα τις γυναίκες. Αποτελείτε ένα παράδειγμα για όλους τους Νιγηριανούς που θέλουν να αφήσουν πίσω τη φτώχεια και την άγνοια. Υποδεχόμαστε επίσης σήμερα τον Ρόμπερτ Μέναρντ –ο οποίος είναι επίσης πολύ γνωστός σε αυτό το Κοινοβούλιο– Γενικό Γραμματέα των Δημοσιογράφων Χωρίς Σύνορα, και, μέσω εκείνου, όλους τους δημοσιογράφους. Αυτοί οι επαγγελματίες εμφυσούν ζωή στην ελευθερία της ενημέρωσης και ανοίγουν τα μάτια μας σε έναν σκληρό κόσμο. Δεν μπορεί να υπάρξει δημοκρατία χωρίς πλουραλιστική ενημέρωση. Η ενημέρωση είναι η πρώτη ύλη, το κύριο καύσιμο, του συστήματος της δημοκρατίας. Χωρίς αυτή, δεν μπορεί να υπάρχει δημοκρατία. Αποτίνουμε φόρο τιμής σε εκείνους που αγωνίζονται καθημερινά, σε όλα τα μέρη του κόσμου, για να κάνουν αυτή την αρχή πραγματικότητα. Σε όλους εκείνους που πολύ συχνά πέφτουν θύματα εξαιτίας της παθιασμένης αφοσίωσής τους στο επάγγελμά τους. Δυστυχώς, πέφτουν υπερβολικά συχνά θύματα εξαιτίας της παθιασμένης αφοσίωσής τους στο επάγγελμά τους. Πριν από μερικές εβδομάδες, δεν δόθηκε άδεια στον Ρόμπερτ Μέναρντ να παραστεί στην Παγκόσμια Διάσκεψη για την Κοινωνία της Πληροφορίας που διεξήχθη στην Τυνησία. Οι τυνησιακές αρχές φοβούνταν αναμφίβολα αυτά που θα έλεγε. Είναι παράδοξο που αυτό συμβαίνει ακριβώς όταν μιλάμε για το δικαίωμα πρόσβασης στην ελεύθερη ενημέρωση για όλους. Θα ήθελα να σας υπενθυμίσω ότι το 2005, το οποίο πλησιάζει στο τέλος του, 58 δημοσιογράφοι έχασαν τη ζωή τους, ένας κάθε εβδομάδα του χρόνου. Κάθε επτά μέρες ένας δημοσιογράφος πεθαίνει εκτελώντας το καθήκον του. Το 2004 ήταν 53. Δυστυχώς, ο αριθμός αυξάνεται. Θα ήθελα να αποτίσω σήμερα φόρο τιμής σε όλους αυτούς, και σε όλους τους φυλακισμένους ή αγνοούμενους συναδέλφους τους. Αυτό το Κοινοβούλιο τους υποστήριζε και θα τους υποστηρίζει πάντα. Διότι οι δικτατορίες δεν διαρκούν για πάντα. Μερικές διαρκούν πολύ καιρό, πάρα πολύ καιρό, αλλά δεν διαρκούν για πάντα. Μέσω των απάνθρωπων πράξεών τους, ούτε οι τρομοκράτες δεν θα μας στερήσουν την ελευθερία της ενημέρωσης, απαραίτητη βάση της δημοκρατικής ζωής μας. Σε αυτή την επίσημη περίσταση θα ήθελα να μιλήσω για τις «Κυρίες στα Λευκά» και τους λόγους για τους οποίους τους απονέμουμε αυτό το βραβείο. Τέλος, και πριν δώσω τον λόγο στους βραβευθέντες και στους εκπροσώπους τους θα ήθελα να συνδυάσω τις σκέψεις του Βολτέρου και του Μπρεχτ. Δύο διανοουμένων που τους χώριζαν πολλά χρόνια. Ο ένας από αυτούς έφερε το φως και ο άλλος υπέφερε στη σκιά. Τόσο ο Βολτέρος όσο και ο Μπρεχτ χρησιμοποίησαν μία παρόμοια έκφραση, και δεν είμαι πολύ σίγουρος σε ποιον από τους δυο πρέπει να την αποδώσω. Την είπαν σε διαφορετικές εποχές, σε διαφορετικά μέρη και σε διαφορετικές συνθήκες. Επιμένω, ο ένας έφερε το φως και ο άλλος υπέφερε στη σκιά. Και οι δυο είπαν ότι η ελευθερία της έκφρασης είναι το μοναδικό δικαίωμα που ξεχωρίζει την ελευθερία από την τυραννία. Και αν δεν το δεχόμαστε αυτό, καταδικάζουμε τον άνθρωπο στην ατίμωση. Συγχαρητήρια στους νικητές του βραβείου μας για το κουράγιο που έχουν επιδείξει. Ο Βολτέρος και ο Μπρεχτ μας παρακολουθούν. Σας ευχαριστώ πολύ. Κυρία Μπλάνκα Ρέγιες, έχετε τον λόγο. Δυστυχώς, δεν είναι η πρώτη φορά που συμβαίνει αυτό. Ούτε ο Νέλσον Μαντέλα, ούτε η Αούνγκ Σαν Σου Κι, ούτε η Λεϊλά Ζάνα, ούτε ο Γουέι Τζίνγκσεν ήταν σε θέση να έρθουν εδώ για να παραλάβουν το βραβείο τους. Ήρθαν οι εκπρόσωποί τους στη θέση τους. Όταν μπόρεσαν να έρθουν –μερικοί δεν έχουν μπορέσει ακόμη διότι εξακολουθούν να είναι υπό κράτηση– ήρθαν στο Κοινοβούλιο και εμείς συγκεντρωθήκαμε ειδικά για να τους ακούσουμε. Αυτό συνέβη στην περίπτωση του Νέλσον Μαντέλα και πιο πρόσφατα της Λεϊλά Ζάνα. Επομένως, θα πρέπει να συνεχίσουμε να ασκούμε κάθε δυνατή πίεση στις κουβανικές αρχές προκειμένου να τους επιτρέψουν να έρθουν, και όταν συμβεί αυτό θα οργανώσουμε μία πανηγυρική συνεδρίαση ώστε να μπορέσουν να απευθυνθούν στο Κοινοβούλιό μας, όπως έχουμε κάνει σε προηγούμενες περιπτώσεις, και θα κάνουμε ό, τι είναι δυνατό για να διασφαλίσουμε ότι αυτό θα συμβεί το συντομότερο δυνατό."@el10
"Ladies and gentlemen, I am delighted to welcome, on behalf of all of you, on behalf of all of us, the two winners of the European Parliament’s Sakharov Prize 2005 and the representative of the third winner. What all of this year’s winners have in common is their fight for human dignity and freedom. They are worthy successors of the Soviet academic whose name is on the prize that the European Parliament awards. In their different ways, all three symbolise the fight to consolidate human rights in the world. The fight against regimes that imprison critics who dare criticise them. The fight against inhuman laws. The fight against those who deny the right to information and against the terrorists who want to banish the right to information. The European Parliament has supported this year’s winners by means of its resolutions and its initiatives. They are well known to us. We have followed their work, we have followed their fight. Their presence here is just the end of a process that we have shared by means of our resolutions. It is a fight for a more democratic and more just world. Please allow me to point out, here in this esteemed Chamber, that many Europeans believe that the right to have one’s human rights respected is something natural, something inevitable, which is practically free, and that it has always been the case. Unfortunately, despite all of the efforts made right up to the last minute, the ‘Women in White’ have not been given permission to leave Cuba to be with us today. No, it has not always been the case, and nor is it yet the case in many parts of the world, unfortunately. For the great majority of humanity it is still a distant dream. And for this reason, we Europeans have a special duty to defend and promote human rights in the world. I would like to speak briefly about each of our prize-winners: the ‘Women in White’ are represented by Mrs Blanca Reyes, who has been a ‘Woman in White’ until she fortunately ceased to be one when her husband was set free, whom I had the pleasure to receive on your behalf in this Parliament immediately after he was released from prison. These women demonstrate peacefully every week in Havana to express their solidarity with relatives and friends in prison since March 2003. To a certain extent they are also continuing the phenomenon that was known at the time as the ‘Mothers of the Plaza de Mayo’, to whom we also awarded a prize. The only crime of many of these prisoners is to express publicly their opposition to the government as ordinary citizens, as independent journalists or as peaceful dissidents. Many of them have become seriously ill during their imprisonment in conditions which Mrs Reyes will no doubt describe to us. We called for the release of these prisoners in April 2004 and unfortunately this is still far from being achieved, despite certain individual cases that have arisen. The experience of many European countries shows us that it is not possible to establish the conditions for a transition to democracy, a peaceful transition to democracy, by imprisoning dissidents, quite the opposite. Let us hope that the transition to democracy in Cuba takes good note of the experience of certain European countries. Mrs Hauwa Ibrahim: You have used your talents as a lawyer to promote the rule of law. Your strength, as you said to me when I received you this morning, lies in respect for the law. We admire your determination. I believe that I can say on behalf of the entire European Parliament that we regret and reject this attitude on the part of the Cuban authorities. In this enormous country of Nigeria, you defend people who live with the threat of cruel and inhuman punishments. Punishments which are applied in accordance with Sharia law in twelve States of your country. You fight for these people’s right to a fair trial, in accordance with the law. Please believe me that we felt moved and indignant while watching the proceedings against Amina Lawal and Safya Hussaini, accused of adultery. You made sure that the law prevailed, demanding respect for the Constitution and for the international Treaties signed by Nigeria. It is inconceivable that a woman accused of adultery can still be stoned. It is inconceivable that a woman accused of adultery can be stoned as in biblical times; we cannot condone the amputation of young criminals. This Parliament has spoken out vigorously against these inhuman punishments and against the death penalty on many occasions. Mrs Ibrahim, we stand shoulder to shoulder with you in rejecting this cruelty and our rejection will be total. We admire your personal commitment. The personal commitment that you express with great conviction: that of the right to education for the poor, in particular women, because poverty harms women especially. You are an example for all Nigerians who want to leave behind poverty and ignorance. We are also receiving Robert Ménard today, who is well known to this House, Secretary-General of Reporters Without Borders, and, through him, all journalists. These professional people breathe life into freedom of information and open our eyes to a cruel world. There can be no democracy without pluralist information. Information is the raw material, the principal fuel, of the system of democracy. Without it there can be no democracy. We pay homage to those who fight every day, in every part of the world, to make this principle a reality. To those who all too frequently fall victim as a result of their passionate pursuit of their duties. Unfortunately, they all too often fall victim as a result of their passionate pursuit of their duties. A few weeks ago, Robert Ménard was denied permission to attend the Information Summit taking place in Tunisia. The Tunisian authorities were undoubtedly afraid of what he would say. It is a great paradox that this should happen precisely when we are talking about the right to access to free information for everybody. I would like to remind you that in 2005, which is drawing to a close, 58 journalists have lost their lives, one every week of the year, every seven days a journalist dies while carrying out their duty. In 2004 that figure was 53. Unfortunately, it is increasing. I would like to pay tribute to all of them, and to all of their imprisoned or disappeared colleagues. This Parliament has acted and will always act in support of them. Because dictatorships do not last forever. Some last a long time, too long, but they do not last forever. Through their brutal actions, the terrorists will not deny us freedom of information either, the essential basis of our democratic life. On this formal occasion I would like to talk about the ‘Women in White’ and our reasons for awarding them this prize. Finally, and before giving the floor to our winners and their representatives I would like to combine the thoughts of Voltaire and Brecht. Two intellectuals separated by many years. One of them opened up the light and the other suffered in the shadows. Both Voltaire and Brecht used a similar expression, and I am not very sure to which of them it should be most attributed. They said it during different eras, in different places and in different circumstances. I would insist, one of them was opening up the light and the other was enduring the shadows. Both said that freedom of expression is the only right that separates freedom from tyranny. And not to accept this is to condemn the human being to ignominy. Congratulations to our prize winners on the courage they have shown. Voltaire and Brecht are watching us. Thank you very much. Mrs Blanca Reyes, you have the floor. This is unfortunately not the first time that this has happened. Neither Nelson Mandela, Aung San Suu Kyi, Leyla Zana, nor Wei Jingshen were able to come here to receive their prize. Their representatives came instead of them. When they we able to – some have not yet been able because they are still being detained – they came to the House and we met especially to hear them. This happened in the case of Nelson Mandela and more recently Leyla Zana. We shall therefore continue to apply every possible pressure on the Cuban authorities to allow them to come, and when they do we shall organise a formal sitting so that they can address our House, as we have on previous occasions, and we will do everything we can to ensure that this happens as soon as possible."@en4
"Señoras y señores, estimados colegas, me complace mucho recibir, en nombre de todos ustedes, en nombre de todos nosotros, a los dos galardonados del Premio Sájarov 2005 que otorga el Parlamento Europeo y a la representante del tercer galardonado. Todos los galardonados de este año tienen en común su lucha por la libertad y la dignidad humana. Son dignos sucesores del académico soviético que da nombre al premio que concede el Parlamento Europeo. Los tres, cada uno a su manera, simbolizan la lucha por la afirmación de los derechos humanos en el mundo. La lucha frente a los regímenes que encarcelan a los críticos que tienen la osadía de criticarles. La lucha frente a leyes inhumanas. La lucha frente a los que niegan el derecho a la información y en contra de los terroristas que quieren hundir el derecho a la información en las tinieblas. El Parlamento Europeo ha apoyado a nuestros galardonados de este año a través de sus resoluciones y de sus iniciativas. Son bien conocidos por nosotros. Hemos seguido su trabajo, hemos seguido su lucha. Su presencia aquí no es sino el final de un proceso que hemos compartido a través de nuestras resoluciones. Es una lucha por un mundo más democrático y más justo. Permítanme decir, desde esta alta tribuna, que muchos europeos consideran que el derecho al respeto de los derechos humanos es algo natural, consustancial, que prácticamente es gratuito y que siempre ha sido así. En efecto, a pesar de todas las gestiones efectuadas hasta el último momento, desgraciadamente, las «Damas de Blanco» no han sido autorizadas a salir de Cuba para estar hoy con nosotros. No, ni siempre ha sido así, ni es así todavía, desgraciadamente, en muchas partes del mundo. Para la gran mayoría de la humanidad todavía es un sueño lejano. Y por eso, a nosotros, europeos, nos corresponde una especial responsabilidad en la defensa y en la promoción de los derechos humanos en todo el mundo. Permítanme un breve glosa de nuestros galardonados: las «Damas de Blanco» están representadas por la señora Blanca Reyes, que también ha sido «Dama de Blanco» hasta que, afortunadamente para ella, dejó de serlo, puesto que se consiguió la liberación de su esposo, al que tuve el placer de recibir en su nombre en este Parlamento inmediatamente después de que saliera de la cárcel. Estas damas se manifiestan pacíficamente todas las semanas del año en La Habana, para expresar su solidaridad con familiares y amigos encarcelados, desde marzo del 2003. De alguna manera son también las continuadoras del fenómeno que se conoció en su día como las «Madres de la Plaza de Mayo» que también fueron galardonadas por nosotros. El delito de muchos de estos prisioneros, de estos presos, no es sino el de expresar públicamente su oposición al poder como simples ciudadanos, como periodistas independientes o como disidentes pacíficos. Muchos de ellos han caído gravemente enfermos durante su detención en condiciones que, sin duda, la señora Reyes nos explicará. Hemos pedido la liberación de estos prisioneros en abril del año 2004 y todavía, desgraciadamente, hace falta mucho para conseguirlo, a pesar de algunos casos individuales que se han producido. La experiencia de muchos de los países europeos nos enseña que la transición a la democracia, una transición pacífica a la democracia, no se prepara precisamente encarcelando a los disidentes, sino todo lo contrario. Ojalá que la transición a la democracia en Cuba tome buena nota de la experiencia de algunos países europeos. Señora Hauwa Ibrahim: Usted ha puesto su talento de abogada al servicio del Estado de Derecho. Su fuerza, como me decía al recibirla esta mañana, es el respeto de la Ley. Admiramos su determinación. Creo poder hablar en nombre de todo el Parlamento Europeo para lamentar y rechazar esta actitud de las autoridades cubanas. En este inmenso país que es Nigeria, usted defiende a las personas que viven bajo la amenaza de penas crueles e inhumanas. De penas que se aplican en virtud de la «Sharia» en doce Estados de su país. Usted lucha por el derecho de esas personas a un juicio justo, de acuerdo con la ley. Hemos seguido, créame, con indignada emoción los procesos incoados contra Amina Lawal y Safya Hussaini, acusadas de adulterio. Usted consiguió que triunfara la ley, exigiendo el respeto de la Constitución y de los Tratados internacionales firmados por Nigeria. Es inconcebible que todavía se pueda lapidar a una mujer acusada de adulterio; Es inconcebible que se pueda lapidar a una mujer acusada de adulterio como en los tiempos bíblicos; no se puede condenar a la amputación a jóvenes incriminados. En repetidas ocasiones, este Parlamento se ha expresado con firmeza contra esas penas inhumanas y contra la pena de muerte. Señora Ibrahim: somos sus aliados en el rechazo de esta crueldad y seremos intransigentes en este rechazo. Admiramos su compromiso personal. El compromiso personal que usted expresa con una fuerte convicción: la del derecho a la educación de los pobres, especialmente, de las mujeres, porque la pobreza se ceba especialmente en la mujer. Es usted un ejemplo para todas las nigerianas que quieren salir de la pobreza y la ignorancia. También recibimos hoy a Robert Ménard, conocido de esta casa, secretario general de Reporteros sin Fronteras, y, con él, a todos los periodistas. A unos profesionales que insuflan vida a la libertad de información, que nos abren los ojos a un mundo cruel. No puede haber democracia sin una información plural. La democracia es un sistema que tiene a la información como materia prima, como combustible primario. Sin él no puede haber democracia. Rendimos homenaje a los que luchan para hacer realidad todos los días, en todas las partes del mundo este principio. A aquellos que con demasiada frecuencia caen víctimas de la entrega apasionada a su profesión. Por desgracia, demasiado a menudo caen víctimas de la entrega apasionada a su profesión. Hace muy pocas semanas, a Robert Ménard le fue negada la autorización para acudir a la Cumbre de la Información que se celebraba en Túnez. Las autoridades tunecinas temían, sin duda, su testimonio. No deja de ser paradójico que esto ocurra precisamente cuando se habla del derecho al acceso a información libre para todos. Permítanme recordarles que en el año 2005, que ahora acaba, han perdido la vida 58 periodistas, uno cada semana del año, cada siete días muere un periodista en el ejercicio de sus funciones. En el 2004 fueron 53. Desgraciadamente, la cifra aumenta. Quiero rendir hoy homenaje a todos ellos, y a todos sus compañeros encarcelados o desaparecidos. Este Parlamento se ha movilizado y se movilizará siempre a su favor. Porque las dictaduras no duran eternamente. Algunas duran mucho, demasiado, pero no duran eternamente. Con sus actos crueles, tampoco los terroristas conseguirán suprimir la libertad de información, base imprescindible de nuestra vida democrática. En este momento solemne quiero recordar a las «Damas de Blanco» y las razones por las cuales han sido galardonadas por el Parlamento Europeo. Para terminar, y antes de dar la palabra a nuestros galardonados y a su representante quiero unir en una misma cita a Voltaire y a Brecht. Dos intelectuales separados por muchos años. Uno que abrió las luces y otro que sufrió las tinieblas. Voltaire y Brecht, los dos, coinciden en una expresión, que no sabría muy bien a quien atribuir prioritariamente. Lo dijeron en distintas épocas y distintos lugares y desde distintas situaciones. Insisto, uno abriendo la luz y otro soportando las tinieblas. Ambos dijeron que la libertad de expresión es el único derecho que separa la libertad de la tiranía. Y no aceptarlo es condenar al ser humano en el oprobio. Enhorabuena a nuestros galardonados por el coraje que han demostrado. Voltaire y Brecht nos están observando Muchas gracias. Señora Blanca Reyes, tiene usted la palabra. Desgraciadamente no es la primera vez que ocurre, ni Nelson Mandela, ni Aung San Suu Kyi, ni Leyla Zana, ni Wei Jingshen pudieron acudir en su día a recoger su premio. Sus representantes acudieron aquí para hacerlo. Y cuando pudieron hacerlo, y algunos todavía no han podido porque siguen detenidos, vinieron a la Cámara y nos reunimos expresamente para escucharles. Este fue el caso de Nelson Mandela y, más recientemente, de Leyla Zana. Por lo tanto, seguiremos haciendo toda la presión sobre las autoridades cubanas para que puedan venir, y cuando vengan organizaremos, como hemos hecho en otras ocasiones, una sesión solemne para que puedan dirigirse a nuestro Pleno y haremos lo posible para que esto sea cuanto antes."@et5
"Hyvät kuulijat, minulla on kaikkien teidän ja kaikkien meidän puolesta ilo toivottaa tervetulleiksi kaksi Euroopan parlamentin vuoden 2005 Saharov-palkinnon voittajaa ja kolmannen voittajan edustaja. Tämän vuoden palkituille on kaikille yhteistä se, että he puolustavat ihmisarvoa ja vapautta. He ansaitsevat paikkansa neuvostoliittolaisen akateemikon seuraajina, joka on antanut nimensä tälle Euroopan parlamentin myöntämälle palkinnolle. Kaikki kolme palkittua symbolisoivat omalla tavallaan taistelua ihmisoikeuksien puolesta maailmassa. Tämä on taistelua sellaisia hallitusjärjestelmiä vastaan, jotka vangitsevat ihmiset, jotka uskaltavat arvostella hallintoa. Tämä on taistelua epäinhimillisiä lakeja vastaan. Tämä on taistelua niitä tahoja vastaan, jotka kieltävät oikeuden saada tietoa, ja sellaisia terroristeja vastaan, jotka haluavat poistaa oikeuden tiedonsaantiin. Euroopan parlamentti on tukenut tämänvuotisten voittajien toimintaa päätöslauselmissaan ja aloitteissaan. He ovat meille hyvin tuttuja. Olemme seuranneet heidän työtään ja taisteluaan. Heidän läsnäolonsa täällä on vain päätös prosessille, johon olemme osallistuneet päätöslauselmillamme. Tämä on taistelua entistä demokraattisemman ja oikeudenmukaisemman maailman puolesta. Saanen huomauttaa tässä arvostetussa istuntosalissa, että monet eurooppalaiset pitävät ihmisoikeuksien kunnioittamista luonnollisena, väistämättömänä ja käytännöllisesti katsoen ilmaisena asiana ja uskovat näin olleen aina. Valitettavasti Naiset valkoisissa -ryhmän ei sallittu kaikista viime hetken ponnisteluista huolimatta tulla tänne Kuubasta. Ei, tilanne ei ole aina ollut tällainen, ja valitettavasti monin paikoin maailmassa tilanne ei ole edelleenkään tällainen. Tämä on monille kansoille vasta kaukainen unelma. Siksi meidän eurooppalaisten erityisenä tehtävänä on edistää ihmisoikeuksia kaikkialla maailmassa. Kerron lyhyesti kustakin palkinnon saajasta: Naiset valkoisissa -ryhmää edustaa Blanca Reyes, joka oli itsekin "nainen valkoisissa", kunnes hänen jäsenyytensä onneksi päättyi miehensä vapauttamiseen. Minulla oli ilo tavata hänen miehensä teidän puolestanne täällä parlamentissa pian sen jälkeen, kun hänet oli vapautettu vankilasta. Nämä naiset pitävät viikoittain rauhallisia mielenosoituksia Havannassa perheenjäsentensä ja ystäviensä puolesta, jotka ovat olleet vankilassa maaliskuusta 2003. Tietyllä tavalla heidän voidaan katsoa jatkavan "Plaza de Mayon äideiksi" aikanaan kutsutun ryhmän toimintaa. Olemme palkinneet myös tämän ryhmän. Monien näiden vankien ainoana rikoksena on ollut, että he ovat ilmaisseet julkisesti tavallisina kansalaisina, itsenäisinä toimittajina tai rauhallisina toisinajattelijoina vastustavansa hallitusta. Monet heistä ovat sairastuneet ollessaan vangittuna olosuhteissa, joista Blanca Reyes varmasti kertoo meille. Vaadimme näiden vankien vapauttamista huhtikuussa 2004, mitä ei ole vielä suinkaan tapahtunut, muutamia yksittäisiä tapauksia lukuun ottamatta. Kokemukset monissa Euroopan maissa ovat osoittaneet, ettei demokratiaan siirtymistä, rauhallista demokratiaan siirtymistä voida toteuttaa vangitsemalla toisinajattelijoita; päinvastoin. Toivokaamme, että Kuuba ottaa demokratiaan siirtyessään hyvin oppia tiettyjen Euroopan maiden kokemuksista. Hauwa Ibrahim: Olette pyrkinyt asianajajana edistämään oikeusvaltion periaatteen noudattamista. Kun tapasin teidät tänään aamulla, kerroitte vahvuudeksenne lainkuuliaisuuden. Arvostamme päättäväisyyttänne. Voinen todeta koko Euroopan parlamentin puolesta, että pahoittelemme ja vastustamme Kuuban viranomaisten kantaa asiassa. Puolustatte valtavan Nigerian alueella ihmisiä, joita uhataan julmilla ja epäinhimillisillä rangaistuksilla. Nämä ovat sharia-lain mukaisia rangaistuksia, joita sovelletaan 12:ssa maanne osavaltiossa. Puolustatte näiden ihmisten oikeutta oikeudenmukaiseen oikeudenkäyntiin, jossa noudatetaan lainsäädäntöä. Voitte uskoa, että olimme liikuttuneita ja vihaisia, kun seurasimme aviorikoksesta syytettyjä Amina Lawalia ja Safaya Hussainia vastaan käytyjä oikeudenkäyntejä. Varmistitte, että lakia noudatettiin, ja vaaditte perustuslain ja Nigerian allekirjoittamien kansainvälisten sopimusten noudattamista. On käsittämätöntä, että aviorikoksesta syytettyjä naisia voidaan edelleen kivittää. On käsittämätöntä, että aviorikoksesta syytettyjä naisia voidaan kivittää kuten joskus muinoin. Emme myöskään suvaitse, että nuoria rikollisia tuomitaan amputointiin. Euroopan parlamentti on tarmokkaasti moneen otteeseen ilmaissut vastustavansa näitä epäinhimillisiä rangaistuksia ja kuolemanrangaistusta. Arvoisa Hauwa Ibrahim, tuemme työtänne näiden raakalaisuuksien lopettamiseksi, ja kieltäydymme täysin hyväksymästä niitä. Henkilökohtainen sitoutumisenne asiaan on ihailtavaa. Sitoutumisenne asiaan on todella vakuuttavaa: puolustatte köyhien oikeutta koulutukseen ja erityisesti naisten oikeutta koulutukseen, koska köyhyydestä on haittaa etenkin naisille. Olette esimerkkinä kaikille nigerialaisille, jotka haluavat eroon köyhyydestä ja tietämättömyydestä. Vieraanamme on tänään myös Robert Ménard, jonka parlamentti tuntee hyvin. Hän on Toimittajat ilman rajoja –järjestön pääsihteeri, ja hänen välityksellään täällä ovat läsnä kaikki toimittajat. Nämä ammattilaiset varmistavat tiedonsaannin ja avaavat silmämme julmalle maailmalle. Ilman moniarvoista tietoa ei voi olla demokratiaa. Tieto on demokratiajärjestelmän raaka-aine ja pääasiallinen katalysaattori. Ilman tietoa ei voi olla demokratiaa. Kunnioitamme kaikkia, jotka taistelevat päivittäin kaikkialla maailmassa, jotta tämä periaate toteutuisi käytännössä. Kunnioitamme kaikkia, jotka joutuvat aivan liian usein itse uhreiksi toteuttaessaan kunnianhimoisesti tehtäviään. Valitettavasti he joutuvat aivan liian usein uhreiksi kunnianhimoisissa tehtävissään. Muutama viikko sitten Robert Ménardilta evättiin lupa osallistua Tunisiassa järjestettyyn tietoyhteiskuntahuippukokoukseen. Tunisian viranomaiset epäilemättä pelkäsivät, mitä hän puhuisi. On todella ristiriitaista, että tällaista tapahtuu juuri nyt, kun puhutaan kaikille vapaasta tiedonsaannista. Muistutan teitä siitä, että vuonna 2005, joka on juuri lopuillaan, on menettänyt henkensä 58 toimittajaa, eli yksi vuoden jokaisena viikkona. Joka seitsemäs päivä kuolee toimittaja tehdessään työtään. Vuonna 2004 tuo luku oli 53. Valitettavasti luku suurenee. Haluan osoittaa kunnioitusta kaikkia uhreiksi joutuneita toimittajia sekä kaikkia heidän vangittuja tai kadonneita kollegojaan kohtaan. Parlamentti on tukenut ja on aina tukeva heitä vastakin. Diktatuurit eivät näet ole ikuisia. Jotkut kestävät kauan, liian kauan, mutta eivät ikuisesti. Terroristit eivät pysty raakalaismaisilla toimillaan viemään meiltä tiedottamisen vapautta, demokraattisen elämämme olennaista perustaa. Tämän juhlaistunnon ansiosta meillä on hyvä tilaisuus puhua Naiset valkoisissa -liikkeestä ja siitä, miksi myönsimme tämän palkinnon heille. Ennen kuin annan puheenvuoron palkituille ja heidän edustajilleen haluan vielä yhdistää Voltairen ja Brechtin ajatukset. Näiden kahden intellektuellin välillä on monia vuosia. Toinen heistä toi valon ja toinen kärsi varjoissa. Voltaire ja Brect käyttivät molemmat samanlaista ilmausta, enkä ole aivan varma, kummalle se enemmän kuuluisi. He käyttivät sitä eri aikakausina, eri paikoissa ja erilaisissa olosuhteissa. Korostan siis, että toinen heistä toi valon ja toinen kärsi varjoissa. Heidän mukaansa sananvapaus on ainoa oikeus, joka erottaa vapauden ja tyrannian toisistaan. Jos tämä kielletään, on ihminen tuomittu häpeään. Onnittelen palkinnonsaajia heidän rohkeudestaan. Voltaire ja Brecht valvovat meitä. Kiitos paljon. Annan puheenvuoron teille, hyvä Blanca Reyes. Valitettavasti ei ole ensimmäinen kerta, kun palkitut eivät pääse noutamaan palkintoaan. Nelson Mandela, Aung San Suu Kyi, Leyla Zana ja Wei Jingshen eivät myöskään päässeet paikalle. Heidän sijastaan paikalle saapuivat heidän edustajansa. Tilaisuuden tullen – kaikille sitä ei ole vielä suotu, koska he ovat edelleen pidätettyinä – he saapuivat parlamenttiin, ja pidimme erityisistunnon kuullaksemme heitä. Näin tehtiin Nelson Mandelan kanssa ja viimeksi Leyla Zanan kanssa. Jatkamme Kuuban viranomaisten painostusta kaikin tavoin, jotta Naiset valkoisissa pääsevät noutamaan palkintonsa. Kun he tulevat, järjestämme virallisen istunnon, jotta he voivat puhua parlamentille. Näin on tehty aikaisemmissakin tapauksissa, ja pyrimme kaikin tavoin varmistamaan, että he pääsevät tänne mahdollisimman pian."@fi7
"Mesdames et Messieurs, je suis ravi d’accueillir, au nom de vous tous, au nom de nous tous, les deux lauréats du prix Sakharov 2005 du Parlement européen et le représentant du troisième lauréat. Le point commun de tous les lauréats de cette année est la défense de la dignité de l’homme et de la liberté. Ce sont de dignes successeurs de l’académicien soviétique qui a donné son nom au prix remis par le Parlement européen. Chacun à sa manière, les trois lauréats symbolisent la lutte visant à renforcer les droits de l’homme dans le monde. La lutte contre les régimes qui emprisonnent les critiques qui osent les critiquer. La lutte contre les lois inhumaines. La lutte contre ceux qui refusent le droit à l’information et contre les terroristes qui veulent bannir le droit à l’information. Le Parlement européen a soutenu les lauréats de cette année au moyen des résolutions et des initiatives qu’il a prises. Nous les connaissons bien. Nous avons suivi leur travail; nous avons suivi leur lutte. Leur présence parmi nous est simplement la fin d’un processus que nous avons partagé par l’adoption de nos résolutions. Il s’agit d’une lutte pour un monde plus démocratique et plus juste. Permettez-moi de signaler, dans cette honorable Assemblée, que beaucoup d’Européens pensent que le droit au respect des droits de l’homme est un droit naturel et inhérent, qui, concrètement, est gratuit, et que cela a toujours été le cas. Il est regrettable que, malgré tous les efforts déployés jusqu’en dernière minute, les «Dames en blanc» n’aient pas obtenu l’autorisation de quitter Cuba pour être parmi nous, aujourd’hui. Non, cela n’a pas toujours été le cas et ce n’est toujours pas le cas dans bon nombre de régions du monde, malheureusement. Pour la grande majorité de l’humanité, cela reste un rêve lointain. C’est pourquoi nous, Européens, avons le devoir particulier de défendre et de promouvoir les droits de l’homme dans le monde. Je voudrais parler brièvement de chacun de nos lauréats: les «Dames en blanc» sont représentées par Mme Blanca Reyes, qui a été une «Dame en blanc», mais qui, par bonheur, ne l’est plus depuis la libération de son mari. J’ai eu le plaisir de la recevoir en votre nom, dans ce Parlement, immédiatement après la sortie de prison de son époux. Ces dames manifestent pacifiquement chaque semaine, à La Havane, afin d’exprimer leur solidarité avec leurs parents et amis emprisonnés depuis mars 2003. Dans une certaine mesure, elles poursuivent également le phénomène connu à l’époque sous le nom de «Mères de la place de Mai», à qui nous avons également décerné un prix. Le seul délit d’une grande partie de ces prisonniers est d’avoir exprimé publiquement leur opposition au gouvernement, en tant que citoyens ordinaires, en tant que journalistes indépendants ou en tant que dissidents pacifiques. Bon nombre d’entre eux sont tombés gravement malades durant leur détention, dans des conditions que Mme Reyes nous décrira sans doute. Nous avons demandé la libération de ces prisonniers en avril 2004 et, malheureusement, notre requête reste loin d’être satisfaite, malgré certains cas individuels. L’expérience de nombreux pays européens nous montre que l’établissement des conditions d’une transition vers la démocratie - une transition pacifique vers la démocratie - ne peut se faire en emprisonnant des dissidents, bien au contraire. Espérons que la transition vers la démocratie à Cuba tienne compte de l’expérience de certains pays européens. Madame Hauwa Ibrahim: Grâce à vos talents d’avocate, vous avez promu l’État de droit. Votre force, comme vous me l’avez dit quand je vous ai reçue ce matin, réside dans le respect de la loi. Nous admirons votre détermination. Je crois que je peux affirmer au nom de l’ensemble du Parlement européen que nous regrettons et rejetons cette attitude des autorités cubaines. Dans cet immense pays qu’est le Nigeria, vous défendez des personnes qui vivent sous la menace de peines cruelles et inhumaines. Des peines qui sont appliquées en vertu de la sharia dans douze États de votre pays. Vous luttez en faveur du droit de ces personnes à un procès équitable, conformément à la législation. Croyez bien que nous avons éprouvé une vive émotion et indignation en regardant les procès intentés contre Amina Lawal et Safya Hussaini, accusées d’adultère. Vous avez veillé à faire prévaloir la législation, en exigeant le respect de la Constitution et des traités internationaux signés par le Nigeria. Il est inconcevable qu’une femme accusée d’adultère soit toujours lapidée. Il est inconcevable qu’une femme accusée d’adultère soit lapidée comme aux temps bibliques; nous ne pouvons pas admettre l’amputation de jeunes criminels. En de nombreuses occasions, ce Parlement s’est exprimé avec vigueur contre ces peines inhumaines et contre la peine de mort. Madame Ibrahim, nous vous soutenons dans le rejet de cette cruauté et notre rejet sera absolu. Nous admirons votre engagement personnel. L’engagement personnel que vous présentez avec une grande conviction: celle du droit à l’éducation des pauvres, en particulier des femmes, car la pauvreté touche précisément les femmes. Vous êtes un modèle pour tous les Nigérians qui veulent sortir de la pauvreté et de l’ignorance. Aujourd’hui, nous recevons également M. Robert Ménard, secrétaire général de Reporters sans frontières, bien connu dans cette Assemblée, et, par son intermédiaire, tous les journalistes. Ces professionnels redonnent de l’espoir en faveur de la liberté d’information et nous ouvrent les yeux sur un monde cruel. La démocratie ne peut exister sans une information pluraliste. L’information constitue la matière première, le combustible principal, du système démocratique. Sans elle, il ne peut y avoir de démocratie. Nous rendons hommage aux personnes qui luttent chaque jour, dans le monde entier, pour faire de ce principe une réalité. Aux personnes qui, bien trop fréquemment, sont victimes de la passion avec laquelle elles accomplissent leurs devoirs. Malheureusement, elles sont bien trop fréquemment victimes de la passion avec laquelle elles exercent leurs fonctions. Il y a quelques semaines, Robert Ménard s’est vu refuser l’accès au sommet sur la société de l’information, qui se tenait en Tunisie. Les autorités tunisiennes ont, sans aucun doute, eu peur de ce qu’il dirait. Il est absolument paradoxal que cela se produise au moment précis où nous parlons du droit à l’accès aux informations libres pour tous. Je voudrais vous rappeler qu’en 2005, qui touche à sa fin, 58 journalistes ont perdu la vie: une fois par semaine sur une année, une fois tous les sept jours, un journaliste meurt dans l’exercice de ses fonctions. En 2004, ce chiffre était de 53. Nous déplorons qu’il soit en augmentation. Je voudrais rendre hommage à tous ces journalistes et à tous leurs collègues emprisonnés ou disparus. Ce Parlement a agi et agira toujours en leur faveur. Parce que les dictatures ne durent pas éternellement. Certaines restent en place longtemps, trop longtemps, mais elles ne durent pas éternellement. Par leurs actes de violence, les terroristes ne nous interdiront pas la liberté d’information, qui est le fondement de notre vie démocratique. En ce moment solennel, je voudrais parler des «Dames en blanc» et des raisons pour lesquelles nous leur avons décerné ce prix. Pour conclure, et avant de donner la parole à nos lauréats et à leurs représentants, je voudrais associer les pensées de Voltaire et de Brecht, deux intellectuels séparés par de nombreuses années. L’un a ouvert les lumières et l’autre a souffert dans l’ombre. Tant Voltaire que Brecht ont utilisé une expression semblable et je ne sais pas vraiment à qui attribuer le plus la paternité de cette pensée. Ils l’ont formulée à des époques différentes, en des lieux différents et dans des circonstances différentes. Je tiens à insister sur le fait que l’un a ouvert les lumières et l’autre a enduré les ténèbres. Tous deux ont déclaré que la liberté d’expression est le seul droit qui sépare la liberté de la tyrannie. Et ne pas l’accepter revient à condamner l’être humain à l’ignominie. Félicitations à nos lauréats pour le courage dont ils ont fait preuve. Voltaire et Brecht nous observent. Merci beaucoup. Madame Blanca Reyes, vous avez la parole. Ce n’est malheureusement pas la première fois que cela arrive. Ni Nelson Mandela ni Aung San Suu Kyi ni Leyla Zana ni Wei Jingshen n’ont pu venir ici pour recevoir leur prix. Leurs représentants sont venus ici à leur place. Quand ils ont pu le faire - certains n’ont pas encore pu le faire, car ils sont toujours détenus -, ils sont venus au Parlement et nous nous sommes réunis tout spécialement pour les écouter. Ce fut le cas de Nelson Mandela et, plus récemment, de Leyla Zana. Par conséquent, nous continuerons, autant que possible, de faire pression sur les autorités cubaines afin de leur permettre de venir et, lorsqu’elles viendront, nous organiserons une réunion officielle pour qu’elles puissent s’adresser à notre Assemblée, comme nous l’avons fait en d’autres occasions, et nous mettrons tout en œuvre pour nous assurer que cette rencontre ait lieu le plus rapidement possible."@fr8
"Señoras y señores, estimados colegas, me complace mucho recibir, en nombre de todos ustedes, en nombre de todos nosotros, a los dos galardonados del Premio Sájarov 2005 que otorga el Parlamento Europeo y a la representante del tercer galardonado. Todos los galardonados de este año tienen en común su lucha por la libertad y la dignidad humana. Son dignos sucesores del académico soviético que da nombre al premio que concede el Parlamento Europeo. Los tres, cada uno a su manera, simbolizan la lucha por la afirmación de los derechos humanos en el mundo. La lucha frente a los regímenes que encarcelan a los críticos que tienen la osadía de criticarles. La lucha frente a leyes inhumanas. La lucha frente a los que niegan el derecho a la información y en contra de los terroristas que quieren hundir el derecho a la información en las tinieblas. El Parlamento Europeo ha apoyado a nuestros galardonados de este año a través de sus resoluciones y de sus iniciativas. Son bien conocidos por nosotros. Hemos seguido su trabajo, hemos seguido su lucha. Su presencia aquí no es sino el final de un proceso que hemos compartido a través de nuestras resoluciones. Es una lucha por un mundo más democrático y más justo. Permítanme decir, desde esta alta tribuna, que muchos europeos consideran que el derecho al respeto de los derechos humanos es algo natural, consustancial, que prácticamente es gratuito y que siempre ha sido así. En efecto, a pesar de todas las gestiones efectuadas hasta el último momento, desgraciadamente, las «Damas de Blanco» no han sido autorizadas a salir de Cuba para estar hoy con nosotros. No, ni siempre ha sido así, ni es así todavía, desgraciadamente, en muchas partes del mundo. Para la gran mayoría de la humanidad todavía es un sueño lejano. Y por eso, a nosotros, europeos, nos corresponde una especial responsabilidad en la defensa y en la promoción de los derechos humanos en todo el mundo. Permítanme un breve glosa de nuestros galardonados: las «Damas de Blanco» están representadas por la señora Blanca Reyes, que también ha sido «Dama de Blanco» hasta que, afortunadamente para ella, dejó de serlo, puesto que se consiguió la liberación de su esposo, al que tuve el placer de recibir en su nombre en este Parlamento inmediatamente después de que saliera de la cárcel. Estas damas se manifiestan pacíficamente todas las semanas del año en La Habana, para expresar su solidaridad con familiares y amigos encarcelados, desde marzo del 2003. De alguna manera son también las continuadoras del fenómeno que se conoció en su día como las «Madres de la Plaza de Mayo» que también fueron galardonadas por nosotros. El delito de muchos de estos prisioneros, de estos presos, no es sino el de expresar públicamente su oposición al poder como simples ciudadanos, como periodistas independientes o como disidentes pacíficos. Muchos de ellos han caído gravemente enfermos durante su detención en condiciones que, sin duda, la señora Reyes nos explicará. Hemos pedido la liberación de estos prisioneros en abril del año 2004 y todavía, desgraciadamente, hace falta mucho para conseguirlo, a pesar de algunos casos individuales que se han producido. La experiencia de muchos de los países europeos nos enseña que la transición a la democracia, una transición pacífica a la democracia, no se prepara precisamente encarcelando a los disidentes, sino todo lo contrario. Ojalá que la transición a la democracia en Cuba tome buena nota de la experiencia de algunos países europeos. Señora Hauwa Ibrahim: Usted ha puesto su talento de abogada al servicio del Estado de Derecho. Su fuerza, como me decía al recibirla esta mañana, es el respeto de la Ley. Admiramos su determinación. Creo poder hablar en nombre de todo el Parlamento Europeo para lamentar y rechazar esta actitud de las autoridades cubanas. En este inmenso país que es Nigeria, usted defiende a las personas que viven bajo la amenaza de penas crueles e inhumanas. De penas que se aplican en virtud de la «Sharia» en doce Estados de su país. Usted lucha por el derecho de esas personas a un juicio justo, de acuerdo con la ley. Hemos seguido, créame, con indignada emoción los procesos incoados contra Amina Lawal y Safya Hussaini, acusadas de adulterio. Usted consiguió que triunfara la ley, exigiendo el respeto de la Constitución y de los Tratados internacionales firmados por Nigeria. Es inconcebible que todavía se pueda lapidar a una mujer acusada de adulterio; Es inconcebible que se pueda lapidar a una mujer acusada de adulterio como en los tiempos bíblicos; no se puede condenar a la amputación a jóvenes incriminados. En repetidas ocasiones, este Parlamento se ha expresado con firmeza contra esas penas inhumanas y contra la pena de muerte. Señora Ibrahim: somos sus aliados en el rechazo de esta crueldad y seremos intransigentes en este rechazo. Admiramos su compromiso personal. El compromiso personal que usted expresa con una fuerte convicción: la del derecho a la educación de los pobres, especialmente, de las mujeres, porque la pobreza se ceba especialmente en la mujer. Es usted un ejemplo para todas las nigerianas que quieren salir de la pobreza y la ignorancia. También recibimos hoy a Robert Ménard, conocido de esta casa, secretario general de Reporteros sin Fronteras, y, con él, a todos los periodistas. A unos profesionales que insuflan vida a la libertad de información, que nos abren los ojos a un mundo cruel. No puede haber democracia sin una información plural. La democracia es un sistema que tiene a la información como materia prima, como combustible primario. Sin él no puede haber democracia. Rendimos homenaje a los que luchan para hacer realidad todos los días, en todas las partes del mundo este principio. A aquellos que con demasiada frecuencia caen víctimas de la entrega apasionada a su profesión. Por desgracia, demasiado a menudo caen víctimas de la entrega apasionada a su profesión. Hace muy pocas semanas, a Robert Ménard le fue negada la autorización para acudir a la Cumbre de la Información que se celebraba en Túnez. Las autoridades tunecinas temían, sin duda, su testimonio. No deja de ser paradójico que esto ocurra precisamente cuando se habla del derecho al acceso a información libre para todos. Permítanme recordarles que en el año 2005, que ahora acaba, han perdido la vida 58 periodistas, uno cada semana del año, cada siete días muere un periodista en el ejercicio de sus funciones. En el 2004 fueron 53. Desgraciadamente, la cifra aumenta. Quiero rendir hoy homenaje a todos ellos, y a todos sus compañeros encarcelados o desaparecidos. Este Parlamento se ha movilizado y se movilizará siempre a su favor. Porque las dictaduras no duran eternamente. Algunas duran mucho, demasiado, pero no duran eternamente. Con sus actos crueles, tampoco los terroristas conseguirán suprimir la libertad de información, base imprescindible de nuestra vida democrática. En este momento solemne quiero recordar a las «Damas de Blanco» y las razones por las cuales han sido galardonadas por el Parlamento Europeo. Para terminar, y antes de dar la palabra a nuestros galardonados y a su representante quiero unir en una misma cita a Voltaire y a Brecht. Dos intelectuales separados por muchos años. Uno que abrió las luces y otro que sufrió las tinieblas. Voltaire y Brecht, los dos, coinciden en una expresión, que no sabría muy bien a quien atribuir prioritariamente. Lo dijeron en distintas épocas y distintos lugares y desde distintas situaciones. Insisto, uno abriendo la luz y otro soportando las tinieblas. Ambos dijeron que la libertad de expresión es el único derecho que separa la libertad de la tiranía. Y no aceptarlo es condenar al ser humano en el oprobio. Enhorabuena a nuestros galardonados por el coraje que han demostrado. Voltaire y Brecht nos están observando Muchas gracias. Señora Blanca Reyes, tiene usted la palabra. Desgraciadamente no es la primera vez que ocurre, ni Nelson Mandela, ni Aung San Suu Kyi, ni Leyla Zana, ni Wei Jingshen pudieron acudir en su día a recoger su premio. Sus representantes acudieron aquí para hacerlo. Y cuando pudieron hacerlo, y algunos todavía no han podido porque siguen detenidos, vinieron a la Cámara y nos reunimos expresamente para escucharles. Este fue el caso de Nelson Mandela y, más recientemente, de Leyla Zana. Por lo tanto, seguiremos haciendo toda la presión sobre las autoridades cubanas para que puedan venir, y cuando vengan organizaremos, como hemos hecho en otras ocasiones, una sesión solemne para que puedan dirigirse a nuestro Pleno y haremos lo posible para que esto sea cuanto antes."@hu11
"Signore e signori, onorevoli colleghi, sono molto lieto di accogliere, a nome di tutti voi, a nome di tutti noi, i due vincitori del Premio Sacharov 2005 conferito dal Parlamento europeo, nonché la rappresentante del terzo insignito. Tutti i vincitori di quest’anno hanno in comune la lotta per la libertà e la dignità umana. Sono degni successori dell’accademico sovietico che dà il nome a questo premio conferito dal Parlamento europeo. Tutti e tre, ognuno alla sua maniera, simboleggiano la lotta per l’affermazione dei diritti umani nel mondo. La lotta contro i regimi che imprigionano coloro che hanno l’audacia di criticarli. La lotta contro leggi inumane. La lotta contro chi nega il diritto all’informazione e contro i terroristi che vogliono soffocare il diritto all’informazione. Il Parlamento europeo ha appoggiato i nostri vincitori di quest’anno mediante le sue risoluzioni e le sue iniziative. Li conosciamo bene. Abbiamo seguito il loro lavoro, abbiamo seguito la loro lotta. La loro presenza qui non è altro che la conclusione di un processo che abbiamo condiviso attraverso le nostre risoluzioni. E’ una lotta per un mondo più democratico e più giusto. Consentitemi di dire, in questa prestigiosa Aula, che molti europei credono che il rispetto dei diritti umani sia un diritto naturale, scontato, praticamente gratuito e che sia sempre stato così. Infatti, nonostante tutti gli sforzi compiuti fino all’ultimo momento, purtroppo le non sono state autorizzate a partire da Cuba per essere qui con noi oggi. No, non è sempre stato così, e non è ancora così, purtroppo, in molte parti del mondo. Per la vasta maggioranza dell’umanità è ancora un sogno lontano. Per questo motivo, noi europei abbiamo una particolare responsabilità nel difendere e promuovere i diritti umani in tutto il mondo. Consentitemi di parlare brevemente dei nostri vincitori: le sono rappresentate dalla signora Blanca Reyes, che è stata una fino a quando, fortunatamente per lei, non è più stato necessario, avendo ottenuto la liberazione del marito, che ho avuto il piacere di ricevere a nome vostro in questo Parlamento subito dopo la sua liberazione. Queste donne manifestano pacificamente ogni settimana dell’anno all’Avana dal marzo 2003 per esprimere solidarietà con i familiari e gli amici incarcerati. In qualche modo sono anche le continuatrici del movimento cui diedero il nome a suo tempo le madri di anch’esse da noi premiate. Il reato di molti di questi prigionieri, di questi carcerati, non è altro che quello di esprimere pubblicamente la loro opposizione al governo come semplici cittadini, come giornalisti indipendenti o come dissidenti pacifici. Molti di essi si sono ammalati gravemente durante la detenzione in condizioni che, senza dubbio, la signora Reyes ci descriverà. Abbiamo chiesto la liberazione di questi prigionieri nell’aprile del 2004 e purtroppo il cammino per ottenere tale risultato è ancora lungo, nonostante alcuni casi individuali che sono emersi. L’esperienza di molti paesi europei ci insegna che la transizione verso la democrazia, una transizione pacifica, non si ottiene incarcerando i dissidenti, al contrario. Speriamo che la transizione verso la democrazia a Cuba tenga conto dell’esperienza di certi paesi europei. Signora Hauwa Ibrahim lei ha messo il suo talento di avvocato al servizio dello Stato di diritto. La sua forza, come mi diceva questa mattina quando l’ho ricevuta, è il rispetto della legge. Ammiriamo la sua determinazione. Credo di poter affermare a nome di tutto il Parlamento europeo che deploriamo e respingiamo questo atteggiamento delle autorità cubane. In quell’immenso paese che è la Nigeria, lei difende le persone che vivono sotto la minaccia di pene crudeli e inumane, applicate in nome della in dodici Stati del suo paese. Lei lotta per il diritto di quelle persone a un giudizio giusto, conforme alla legge. Abbiamo seguito, mi creda, con indignata emozione i processi contro Amina Lawal e Safya Hussaini, accusate di adulterio. Lei è riuscita a far trionfare la legge, esigendo il rispetto della costituzione e dei trattati internazionali firmati dalla Nigeria. E’ inconcepibile che ancora oggi si possa lapidare una donna accusata di adulterio. E’ inconcepibile che si possa lapidare una donna accusata di adulterio come ai tempi della Bibbia; non è ammissibile condannare un giovane incriminato all’amputazione di un arto. In varie occasioni, il Parlamento si è espresso con fermezza contro queste condanne inumane e contro la pena di morte. Signora Ibrahim: siamo i suoi alleati nel rifiuto di questa crudeltà e saremo intransigenti in questo rifiuto. Ammiriamo il suo impegno personale, che lei esprime con una forte convinzione: quella del diritto all’istruzione dei poveri, in particolare delle donne, perché la povertà si accanisce specialmente sulle donne. Lei è un esempio per tutte le nigeriane che vogliono uscire dalla povertà e dall’ignoranza. Accogliamo oggi anche Robert Ménard, già ben noto all’Assemblea, segretario generale di e, con lui, tutti i giornalisti. Sono professionisti che infondono nuova vita alla libertà di informazione, che ci aprono gli occhi su un mondo crudele. Non vi può essere democrazia senza un’informazione pluralista. L’informazione è la materia prima, il combustibile primario del sistema democratico. Senza questo elemento non vi può essere democrazia. Rendiamo omaggio a coloro che lottano tutti i giorni, in tutte le parti del mondo, perché questo principio diventi una realtà. A quanti troppo spesso cadono nell’appassionato svolgimento dei loro doveri. Sfortunatamente, troppo spesso cadono vittime della passione per la loro professione. Poche settimane fa è stata negata a Robert Ménard l’autorizzazione a recarsi al Vertice sull’informazione tenutosi a Tunisi. Evidentemente le autorità tunisine avevano paura di ciò che egli avrebbe potuto raccontare. E’ paradossale che una cosa del genere accada proprio mentre parliamo del diritto all’accesso all’informazione libera per tutti. Vorrei ricordarvi che nel 2005, che sta per concludersi, hanno perso la vita 58 giornalisti, uno ogni settimana dell’anno: ogni sette giorni muore un giornalista nell’esercizio delle sue funzioni. Nel 2004 furono 53. Disgraziatamente, il numero è in aumento. Oggi voglio rendere omaggio a tutti loro e a tutti i loro compagni imprigionati o scomparsi. Questo Parlamento si è mobilitato e si mobiliterà sempre a loro favore. Perché le dittature non durano eternamente. Alcune durano molto, troppo, ma non durano in eterno. Nemmeno i terroristi con i loro atti atroci riusciranno a sopprimere la libertà d’informazione, base imprescindibile della nostra vita democratica. In questo solenne momento voglio ricordare le e le ragioni per le quali sono state premiate dal Parlamento europeo. Per concludere, prima di dare la parola ai nostri vincitori e ai loro rappresentanti, voglio citare insieme Voltaire e Brecht, due intellettuali separati da molti anni. Uno aprì la strada ai lumi, l’altro patì le tenebre. Voltaire e Brecht hanno entrambi espresso un pensiero che non saprei a chi attribuire prioritariamente. Lo dissero in epoche e luoghi diversi e in situazioni diverse. Insisto, uno aprendo la via ai lumi e l’altro patendo le tenebre. Entrambi dissero che la libertà di espressione è l’unico diritto che distingue la libertà dalla tirannide. E non accettarlo è condannare l’essere umano all’ignominia. Congratulazioni ai vincitori per il coraggio che hanno dimostrato. Voltaire e Brecht ci stanno osservando. Vi ringrazio molto. Signora Blanca Reyes, a lei la parola. Purtroppo non è la prima volta che accade: sia Nelson Mandela che Aung San Suu Kyi, Leyla Zana e Wei Jingshen non hanno potuto a suo tempo ritirare il premio, che fu consegnato ai loro rappresentanti. Quando finalmente è stato loro possibile venire qui in visita – per qualcuno non è ancora stato possibile perché tuttora in carcere – li abbiamo accolti in Parlamento e ci siamo riuniti espressamente per ascoltarli. E’ stato così per Nelson Mandela e, più recentemente, per Leyla Zana. Pertanto, continueremo a esercitare tutta la pressione possibile sulle autorità cubane affinché le possano raggiungerci, e quando verranno organizzeremo, come abbiamo fatto in altre occasioni, una nuova seduta solenne per consentire loro di parlare alla nostra Assemblea, e faremo tutto il possibile perché ciò avvenga quanto prima."@it12
"Señoras y señores, estimados colegas, me complace mucho recibir, en nombre de todos ustedes, en nombre de todos nosotros, a los dos galardonados del Premio Sájarov 2005 que otorga el Parlamento Europeo y a la representante del tercer galardonado. Todos los galardonados de este año tienen en común su lucha por la libertad y la dignidad humana. Son dignos sucesores del académico soviético que da nombre al premio que concede el Parlamento Europeo. Los tres, cada uno a su manera, simbolizan la lucha por la afirmación de los derechos humanos en el mundo. La lucha frente a los regímenes que encarcelan a los críticos que tienen la osadía de criticarles. La lucha frente a leyes inhumanas. La lucha frente a los que niegan el derecho a la información y en contra de los terroristas que quieren hundir el derecho a la información en las tinieblas. El Parlamento Europeo ha apoyado a nuestros galardonados de este año a través de sus resoluciones y de sus iniciativas. Son bien conocidos por nosotros. Hemos seguido su trabajo, hemos seguido su lucha. Su presencia aquí no es sino el final de un proceso que hemos compartido a través de nuestras resoluciones. Es una lucha por un mundo más democrático y más justo. Permítanme decir, desde esta alta tribuna, que muchos europeos consideran que el derecho al respeto de los derechos humanos es algo natural, consustancial, que prácticamente es gratuito y que siempre ha sido así. En efecto, a pesar de todas las gestiones efectuadas hasta el último momento, desgraciadamente, las «Damas de Blanco» no han sido autorizadas a salir de Cuba para estar hoy con nosotros. No, ni siempre ha sido así, ni es así todavía, desgraciadamente, en muchas partes del mundo. Para la gran mayoría de la humanidad todavía es un sueño lejano. Y por eso, a nosotros, europeos, nos corresponde una especial responsabilidad en la defensa y en la promoción de los derechos humanos en todo el mundo. Permítanme un breve glosa de nuestros galardonados: las «Damas de Blanco» están representadas por la señora Blanca Reyes, que también ha sido «Dama de Blanco» hasta que, afortunadamente para ella, dejó de serlo, puesto que se consiguió la liberación de su esposo, al que tuve el placer de recibir en su nombre en este Parlamento inmediatamente después de que saliera de la cárcel. Estas damas se manifiestan pacíficamente todas las semanas del año en La Habana, para expresar su solidaridad con familiares y amigos encarcelados, desde marzo del 2003. De alguna manera son también las continuadoras del fenómeno que se conoció en su día como las «Madres de la Plaza de Mayo» que también fueron galardonadas por nosotros. El delito de muchos de estos prisioneros, de estos presos, no es sino el de expresar públicamente su oposición al poder como simples ciudadanos, como periodistas independientes o como disidentes pacíficos. Muchos de ellos han caído gravemente enfermos durante su detención en condiciones que, sin duda, la señora Reyes nos explicará. Hemos pedido la liberación de estos prisioneros en abril del año 2004 y todavía, desgraciadamente, hace falta mucho para conseguirlo, a pesar de algunos casos individuales que se han producido. La experiencia de muchos de los países europeos nos enseña que la transición a la democracia, una transición pacífica a la democracia, no se prepara precisamente encarcelando a los disidentes, sino todo lo contrario. Ojalá que la transición a la democracia en Cuba tome buena nota de la experiencia de algunos países europeos. Señora Hauwa Ibrahim: Usted ha puesto su talento de abogada al servicio del Estado de Derecho. Su fuerza, como me decía al recibirla esta mañana, es el respeto de la Ley. Admiramos su determinación. Creo poder hablar en nombre de todo el Parlamento Europeo para lamentar y rechazar esta actitud de las autoridades cubanas. En este inmenso país que es Nigeria, usted defiende a las personas que viven bajo la amenaza de penas crueles e inhumanas. De penas que se aplican en virtud de la «Sharia» en doce Estados de su país. Usted lucha por el derecho de esas personas a un juicio justo, de acuerdo con la ley. Hemos seguido, créame, con indignada emoción los procesos incoados contra Amina Lawal y Safya Hussaini, acusadas de adulterio. Usted consiguió que triunfara la ley, exigiendo el respeto de la Constitución y de los Tratados internacionales firmados por Nigeria. Es inconcebible que todavía se pueda lapidar a una mujer acusada de adulterio; Es inconcebible que se pueda lapidar a una mujer acusada de adulterio como en los tiempos bíblicos; no se puede condenar a la amputación a jóvenes incriminados. En repetidas ocasiones, este Parlamento se ha expresado con firmeza contra esas penas inhumanas y contra la pena de muerte. Señora Ibrahim: somos sus aliados en el rechazo de esta crueldad y seremos intransigentes en este rechazo. Admiramos su compromiso personal. El compromiso personal que usted expresa con una fuerte convicción: la del derecho a la educación de los pobres, especialmente, de las mujeres, porque la pobreza se ceba especialmente en la mujer. Es usted un ejemplo para todas las nigerianas que quieren salir de la pobreza y la ignorancia. También recibimos hoy a Robert Ménard, conocido de esta casa, secretario general de Reporteros sin Fronteras, y, con él, a todos los periodistas. A unos profesionales que insuflan vida a la libertad de información, que nos abren los ojos a un mundo cruel. No puede haber democracia sin una información plural. La democracia es un sistema que tiene a la información como materia prima, como combustible primario. Sin él no puede haber democracia. Rendimos homenaje a los que luchan para hacer realidad todos los días, en todas las partes del mundo este principio. A aquellos que con demasiada frecuencia caen víctimas de la entrega apasionada a su profesión. Por desgracia, demasiado a menudo caen víctimas de la entrega apasionada a su profesión. Hace muy pocas semanas, a Robert Ménard le fue negada la autorización para acudir a la Cumbre de la Información que se celebraba en Túnez. Las autoridades tunecinas temían, sin duda, su testimonio. No deja de ser paradójico que esto ocurra precisamente cuando se habla del derecho al acceso a información libre para todos. Permítanme recordarles que en el año 2005, que ahora acaba, han perdido la vida 58 periodistas, uno cada semana del año, cada siete días muere un periodista en el ejercicio de sus funciones. En el 2004 fueron 53. Desgraciadamente, la cifra aumenta. Quiero rendir hoy homenaje a todos ellos, y a todos sus compañeros encarcelados o desaparecidos. Este Parlamento se ha movilizado y se movilizará siempre a su favor. Porque las dictaduras no duran eternamente. Algunas duran mucho, demasiado, pero no duran eternamente. Con sus actos crueles, tampoco los terroristas conseguirán suprimir la libertad de información, base imprescindible de nuestra vida democrática. En este momento solemne quiero recordar a las «Damas de Blanco» y las razones por las cuales han sido galardonadas por el Parlamento Europeo. Para terminar, y antes de dar la palabra a nuestros galardonados y a su representante quiero unir en una misma cita a Voltaire y a Brecht. Dos intelectuales separados por muchos años. Uno que abrió las luces y otro que sufrió las tinieblas. Voltaire y Brecht, los dos, coinciden en una expresión, que no sabría muy bien a quien atribuir prioritariamente. Lo dijeron en distintas épocas y distintos lugares y desde distintas situaciones. Insisto, uno abriendo la luz y otro soportando las tinieblas. Ambos dijeron que la libertad de expresión es el único derecho que separa la libertad de la tiranía. Y no aceptarlo es condenar al ser humano en el oprobio. Enhorabuena a nuestros galardonados por el coraje que han demostrado. Voltaire y Brecht nos están observando Muchas gracias. Señora Blanca Reyes, tiene usted la palabra. Desgraciadamente no es la primera vez que ocurre, ni Nelson Mandela, ni Aung San Suu Kyi, ni Leyla Zana, ni Wei Jingshen pudieron acudir en su día a recoger su premio. Sus representantes acudieron aquí para hacerlo. Y cuando pudieron hacerlo, y algunos todavía no han podido porque siguen detenidos, vinieron a la Cámara y nos reunimos expresamente para escucharles. Este fue el caso de Nelson Mandela y, más recientemente, de Leyla Zana. Por lo tanto, seguiremos haciendo toda la presión sobre las autoridades cubanas para que puedan venir, y cuando vengan organizaremos, como hemos hecho en otras ocasiones, una sesión solemne para que puedan dirigirse a nuestro Pleno y haremos lo posible para que esto sea cuanto antes."@lt14
"Señoras y señores, estimados colegas, me complace mucho recibir, en nombre de todos ustedes, en nombre de todos nosotros, a los dos galardonados del Premio Sájarov 2005 que otorga el Parlamento Europeo y a la representante del tercer galardonado. Todos los galardonados de este año tienen en común su lucha por la libertad y la dignidad humana. Son dignos sucesores del académico soviético que da nombre al premio que concede el Parlamento Europeo. Los tres, cada uno a su manera, simbolizan la lucha por la afirmación de los derechos humanos en el mundo. La lucha frente a los regímenes que encarcelan a los críticos que tienen la osadía de criticarles. La lucha frente a leyes inhumanas. La lucha frente a los que niegan el derecho a la información y en contra de los terroristas que quieren hundir el derecho a la información en las tinieblas. El Parlamento Europeo ha apoyado a nuestros galardonados de este año a través de sus resoluciones y de sus iniciativas. Son bien conocidos por nosotros. Hemos seguido su trabajo, hemos seguido su lucha. Su presencia aquí no es sino el final de un proceso que hemos compartido a través de nuestras resoluciones. Es una lucha por un mundo más democrático y más justo. Permítanme decir, desde esta alta tribuna, que muchos europeos consideran que el derecho al respeto de los derechos humanos es algo natural, consustancial, que prácticamente es gratuito y que siempre ha sido así. En efecto, a pesar de todas las gestiones efectuadas hasta el último momento, desgraciadamente, las «Damas de Blanco» no han sido autorizadas a salir de Cuba para estar hoy con nosotros. No, ni siempre ha sido así, ni es así todavía, desgraciadamente, en muchas partes del mundo. Para la gran mayoría de la humanidad todavía es un sueño lejano. Y por eso, a nosotros, europeos, nos corresponde una especial responsabilidad en la defensa y en la promoción de los derechos humanos en todo el mundo. Permítanme un breve glosa de nuestros galardonados: las «Damas de Blanco» están representadas por la señora Blanca Reyes, que también ha sido «Dama de Blanco» hasta que, afortunadamente para ella, dejó de serlo, puesto que se consiguió la liberación de su esposo, al que tuve el placer de recibir en su nombre en este Parlamento inmediatamente después de que saliera de la cárcel. Estas damas se manifiestan pacíficamente todas las semanas del año en La Habana, para expresar su solidaridad con familiares y amigos encarcelados, desde marzo del 2003. De alguna manera son también las continuadoras del fenómeno que se conoció en su día como las «Madres de la Plaza de Mayo» que también fueron galardonadas por nosotros. El delito de muchos de estos prisioneros, de estos presos, no es sino el de expresar públicamente su oposición al poder como simples ciudadanos, como periodistas independientes o como disidentes pacíficos. Muchos de ellos han caído gravemente enfermos durante su detención en condiciones que, sin duda, la señora Reyes nos explicará. Hemos pedido la liberación de estos prisioneros en abril del año 2004 y todavía, desgraciadamente, hace falta mucho para conseguirlo, a pesar de algunos casos individuales que se han producido. La experiencia de muchos de los países europeos nos enseña que la transición a la democracia, una transición pacífica a la democracia, no se prepara precisamente encarcelando a los disidentes, sino todo lo contrario. Ojalá que la transición a la democracia en Cuba tome buena nota de la experiencia de algunos países europeos. Señora Hauwa Ibrahim: Usted ha puesto su talento de abogada al servicio del Estado de Derecho. Su fuerza, como me decía al recibirla esta mañana, es el respeto de la Ley. Admiramos su determinación. Creo poder hablar en nombre de todo el Parlamento Europeo para lamentar y rechazar esta actitud de las autoridades cubanas. En este inmenso país que es Nigeria, usted defiende a las personas que viven bajo la amenaza de penas crueles e inhumanas. De penas que se aplican en virtud de la «Sharia» en doce Estados de su país. Usted lucha por el derecho de esas personas a un juicio justo, de acuerdo con la ley. Hemos seguido, créame, con indignada emoción los procesos incoados contra Amina Lawal y Safya Hussaini, acusadas de adulterio. Usted consiguió que triunfara la ley, exigiendo el respeto de la Constitución y de los Tratados internacionales firmados por Nigeria. Es inconcebible que todavía se pueda lapidar a una mujer acusada de adulterio; Es inconcebible que se pueda lapidar a una mujer acusada de adulterio como en los tiempos bíblicos; no se puede condenar a la amputación a jóvenes incriminados. En repetidas ocasiones, este Parlamento se ha expresado con firmeza contra esas penas inhumanas y contra la pena de muerte. Señora Ibrahim: somos sus aliados en el rechazo de esta crueldad y seremos intransigentes en este rechazo. Admiramos su compromiso personal. El compromiso personal que usted expresa con una fuerte convicción: la del derecho a la educación de los pobres, especialmente, de las mujeres, porque la pobreza se ceba especialmente en la mujer. Es usted un ejemplo para todas las nigerianas que quieren salir de la pobreza y la ignorancia. También recibimos hoy a Robert Ménard, conocido de esta casa, secretario general de Reporteros sin Fronteras, y, con él, a todos los periodistas. A unos profesionales que insuflan vida a la libertad de información, que nos abren los ojos a un mundo cruel. No puede haber democracia sin una información plural. La democracia es un sistema que tiene a la información como materia prima, como combustible primario. Sin él no puede haber democracia. Rendimos homenaje a los que luchan para hacer realidad todos los días, en todas las partes del mundo este principio. A aquellos que con demasiada frecuencia caen víctimas de la entrega apasionada a su profesión. Por desgracia, demasiado a menudo caen víctimas de la entrega apasionada a su profesión. Hace muy pocas semanas, a Robert Ménard le fue negada la autorización para acudir a la Cumbre de la Información que se celebraba en Túnez. Las autoridades tunecinas temían, sin duda, su testimonio. No deja de ser paradójico que esto ocurra precisamente cuando se habla del derecho al acceso a información libre para todos. Permítanme recordarles que en el año 2005, que ahora acaba, han perdido la vida 58 periodistas, uno cada semana del año, cada siete días muere un periodista en el ejercicio de sus funciones. En el 2004 fueron 53. Desgraciadamente, la cifra aumenta. Quiero rendir hoy homenaje a todos ellos, y a todos sus compañeros encarcelados o desaparecidos. Este Parlamento se ha movilizado y se movilizará siempre a su favor. Porque las dictaduras no duran eternamente. Algunas duran mucho, demasiado, pero no duran eternamente. Con sus actos crueles, tampoco los terroristas conseguirán suprimir la libertad de información, base imprescindible de nuestra vida democrática. En este momento solemne quiero recordar a las «Damas de Blanco» y las razones por las cuales han sido galardonadas por el Parlamento Europeo. Para terminar, y antes de dar la palabra a nuestros galardonados y a su representante quiero unir en una misma cita a Voltaire y a Brecht. Dos intelectuales separados por muchos años. Uno que abrió las luces y otro que sufrió las tinieblas. Voltaire y Brecht, los dos, coinciden en una expresión, que no sabría muy bien a quien atribuir prioritariamente. Lo dijeron en distintas épocas y distintos lugares y desde distintas situaciones. Insisto, uno abriendo la luz y otro soportando las tinieblas. Ambos dijeron que la libertad de expresión es el único derecho que separa la libertad de la tiranía. Y no aceptarlo es condenar al ser humano en el oprobio. Enhorabuena a nuestros galardonados por el coraje que han demostrado. Voltaire y Brecht nos están observando Muchas gracias. Señora Blanca Reyes, tiene usted la palabra. Desgraciadamente no es la primera vez que ocurre, ni Nelson Mandela, ni Aung San Suu Kyi, ni Leyla Zana, ni Wei Jingshen pudieron acudir en su día a recoger su premio. Sus representantes acudieron aquí para hacerlo. Y cuando pudieron hacerlo, y algunos todavía no han podido porque siguen detenidos, vinieron a la Cámara y nos reunimos expresamente para escucharles. Este fue el caso de Nelson Mandela y, más recientemente, de Leyla Zana. Por lo tanto, seguiremos haciendo toda la presión sobre las autoridades cubanas para que puedan venir, y cuando vengan organizaremos, como hemos hecho en otras ocasiones, una sesión solemne para que puedan dirigirse a nuestro Pleno y haremos lo posible para que esto sea cuanto antes."@lv13
"Señoras y señores, estimados colegas, me complace mucho recibir, en nombre de todos ustedes, en nombre de todos nosotros, a los dos galardonados del Premio Sájarov 2005 que otorga el Parlamento Europeo y a la representante del tercer galardonado. Todos los galardonados de este año tienen en común su lucha por la libertad y la dignidad humana. Son dignos sucesores del académico soviético que da nombre al premio que concede el Parlamento Europeo. Los tres, cada uno a su manera, simbolizan la lucha por la afirmación de los derechos humanos en el mundo. La lucha frente a los regímenes que encarcelan a los críticos que tienen la osadía de criticarles. La lucha frente a leyes inhumanas. La lucha frente a los que niegan el derecho a la información y en contra de los terroristas que quieren hundir el derecho a la información en las tinieblas. El Parlamento Europeo ha apoyado a nuestros galardonados de este año a través de sus resoluciones y de sus iniciativas. Son bien conocidos por nosotros. Hemos seguido su trabajo, hemos seguido su lucha. Su presencia aquí no es sino el final de un proceso que hemos compartido a través de nuestras resoluciones. Es una lucha por un mundo más democrático y más justo. Permítanme decir, desde esta alta tribuna, que muchos europeos consideran que el derecho al respeto de los derechos humanos es algo natural, consustancial, que prácticamente es gratuito y que siempre ha sido así. En efecto, a pesar de todas las gestiones efectuadas hasta el último momento, desgraciadamente, las «Damas de Blanco» no han sido autorizadas a salir de Cuba para estar hoy con nosotros. No, ni siempre ha sido así, ni es así todavía, desgraciadamente, en muchas partes del mundo. Para la gran mayoría de la humanidad todavía es un sueño lejano. Y por eso, a nosotros, europeos, nos corresponde una especial responsabilidad en la defensa y en la promoción de los derechos humanos en todo el mundo. Permítanme un breve glosa de nuestros galardonados: las «Damas de Blanco» están representadas por la señora Blanca Reyes, que también ha sido «Dama de Blanco» hasta que, afortunadamente para ella, dejó de serlo, puesto que se consiguió la liberación de su esposo, al que tuve el placer de recibir en su nombre en este Parlamento inmediatamente después de que saliera de la cárcel. Estas damas se manifiestan pacíficamente todas las semanas del año en La Habana, para expresar su solidaridad con familiares y amigos encarcelados, desde marzo del 2003. De alguna manera son también las continuadoras del fenómeno que se conoció en su día como las «Madres de la Plaza de Mayo» que también fueron galardonadas por nosotros. El delito de muchos de estos prisioneros, de estos presos, no es sino el de expresar públicamente su oposición al poder como simples ciudadanos, como periodistas independientes o como disidentes pacíficos. Muchos de ellos han caído gravemente enfermos durante su detención en condiciones que, sin duda, la señora Reyes nos explicará. Hemos pedido la liberación de estos prisioneros en abril del año 2004 y todavía, desgraciadamente, hace falta mucho para conseguirlo, a pesar de algunos casos individuales que se han producido. La experiencia de muchos de los países europeos nos enseña que la transición a la democracia, una transición pacífica a la democracia, no se prepara precisamente encarcelando a los disidentes, sino todo lo contrario. Ojalá que la transición a la democracia en Cuba tome buena nota de la experiencia de algunos países europeos. Señora Hauwa Ibrahim: Usted ha puesto su talento de abogada al servicio del Estado de Derecho. Su fuerza, como me decía al recibirla esta mañana, es el respeto de la Ley. Admiramos su determinación. Creo poder hablar en nombre de todo el Parlamento Europeo para lamentar y rechazar esta actitud de las autoridades cubanas. En este inmenso país que es Nigeria, usted defiende a las personas que viven bajo la amenaza de penas crueles e inhumanas. De penas que se aplican en virtud de la «Sharia» en doce Estados de su país. Usted lucha por el derecho de esas personas a un juicio justo, de acuerdo con la ley. Hemos seguido, créame, con indignada emoción los procesos incoados contra Amina Lawal y Safya Hussaini, acusadas de adulterio. Usted consiguió que triunfara la ley, exigiendo el respeto de la Constitución y de los Tratados internacionales firmados por Nigeria. Es inconcebible que todavía se pueda lapidar a una mujer acusada de adulterio; Es inconcebible que se pueda lapidar a una mujer acusada de adulterio como en los tiempos bíblicos; no se puede condenar a la amputación a jóvenes incriminados. En repetidas ocasiones, este Parlamento se ha expresado con firmeza contra esas penas inhumanas y contra la pena de muerte. Señora Ibrahim: somos sus aliados en el rechazo de esta crueldad y seremos intransigentes en este rechazo. Admiramos su compromiso personal. El compromiso personal que usted expresa con una fuerte convicción: la del derecho a la educación de los pobres, especialmente, de las mujeres, porque la pobreza se ceba especialmente en la mujer. Es usted un ejemplo para todas las nigerianas que quieren salir de la pobreza y la ignorancia. También recibimos hoy a Robert Ménard, conocido de esta casa, secretario general de Reporteros sin Fronteras, y, con él, a todos los periodistas. A unos profesionales que insuflan vida a la libertad de información, que nos abren los ojos a un mundo cruel. No puede haber democracia sin una información plural. La democracia es un sistema que tiene a la información como materia prima, como combustible primario. Sin él no puede haber democracia. Rendimos homenaje a los que luchan para hacer realidad todos los días, en todas las partes del mundo este principio. A aquellos que con demasiada frecuencia caen víctimas de la entrega apasionada a su profesión. Por desgracia, demasiado a menudo caen víctimas de la entrega apasionada a su profesión. Hace muy pocas semanas, a Robert Ménard le fue negada la autorización para acudir a la Cumbre de la Información que se celebraba en Túnez. Las autoridades tunecinas temían, sin duda, su testimonio. No deja de ser paradójico que esto ocurra precisamente cuando se habla del derecho al acceso a información libre para todos. Permítanme recordarles que en el año 2005, que ahora acaba, han perdido la vida 58 periodistas, uno cada semana del año, cada siete días muere un periodista en el ejercicio de sus funciones. En el 2004 fueron 53. Desgraciadamente, la cifra aumenta. Quiero rendir hoy homenaje a todos ellos, y a todos sus compañeros encarcelados o desaparecidos. Este Parlamento se ha movilizado y se movilizará siempre a su favor. Porque las dictaduras no duran eternamente. Algunas duran mucho, demasiado, pero no duran eternamente. Con sus actos crueles, tampoco los terroristas conseguirán suprimir la libertad de información, base imprescindible de nuestra vida democrática. En este momento solemne quiero recordar a las «Damas de Blanco» y las razones por las cuales han sido galardonadas por el Parlamento Europeo. Para terminar, y antes de dar la palabra a nuestros galardonados y a su representante quiero unir en una misma cita a Voltaire y a Brecht. Dos intelectuales separados por muchos años. Uno que abrió las luces y otro que sufrió las tinieblas. Voltaire y Brecht, los dos, coinciden en una expresión, que no sabría muy bien a quien atribuir prioritariamente. Lo dijeron en distintas épocas y distintos lugares y desde distintas situaciones. Insisto, uno abriendo la luz y otro soportando las tinieblas. Ambos dijeron que la libertad de expresión es el único derecho que separa la libertad de la tiranía. Y no aceptarlo es condenar al ser humano en el oprobio. Enhorabuena a nuestros galardonados por el coraje que han demostrado. Voltaire y Brecht nos están observando Muchas gracias. Señora Blanca Reyes, tiene usted la palabra. Desgraciadamente no es la primera vez que ocurre, ni Nelson Mandela, ni Aung San Suu Kyi, ni Leyla Zana, ni Wei Jingshen pudieron acudir en su día a recoger su premio. Sus representantes acudieron aquí para hacerlo. Y cuando pudieron hacerlo, y algunos todavía no han podido porque siguen detenidos, vinieron a la Cámara y nos reunimos expresamente para escucharles. Este fue el caso de Nelson Mandela y, más recientemente, de Leyla Zana. Por lo tanto, seguiremos haciendo toda la presión sobre las autoridades cubanas para que puedan venir, y cuando vengan organizaremos, como hemos hecho en otras ocasiones, una sesión solemne para que puedan dirigirse a nuestro Pleno y haremos lo posible para que esto sea cuanto antes."@mt15
"Dames en heren, ik ben verheugd namens u, namens ons allen, de twee laureaten van de Sacharov-prijs 2005 en de vertegenwoordigster van de derde laureaat, in het Europees Parlement welkom te mogen heten. De laureaten van dit jaar hebben allen gemeen dat ze strijd voeren voor de menselijke waardigheid en de vrijheid. Het zijn waardige opvolgers van de Sovjetacademicus naar wie de prijs van het Europees Parlement is vernoemd. Op verschillende wijzen staan zij alledrie symbool voor de strijd voor de mensenrechten in de wereld. De strijd tegen regimes waarin degenen die de regering durven te bekritiseren, worden opgesloten. De strijd tegen onmenselijke wetten. De strijd tegen degenen die het recht op informatie ontkennen en tegen terroristen die de toegang tot informatie willen blokkeren. Het Europees Parlement heeft met zijn resoluties en initiatieven de laureaten van dit jaar gesteund. Wij kennen hen goed. Wij hebben hun werk gevolgd; wij hebben hun strijd gevolgd. Hun aanwezigheid hier is de verdiende afsluiting van de inspanningen die we met onze resoluties gezamenlijk hebben ondernomen. Het is een strijd voor een democratischer en rechtvaardiger wereld. Laat mij hier, in dit hooggeachte Parlement, erop wijzen dat veel Europeanen denken dat het recht op eerbiediging van de mensenrechten een natuurlijk recht is, een recht van alle burgers, en dat dit nooit anders is geweest. Ondanks alle inspanningen die tot het laatste moment zijn gedaan, hebben de “Dames in het Wit” helaas geen toestemming gekregen om Cuba te verlaten en hier vandaag bij ons aanwezig te zijn. Integendeel, dat is niet altijd het geval geweest. In grote delen van de wereld is dat helaas nog steeds niet het geval. Voor het merendeel van de wereldbevolking is het een onbereikbare droom. Daarom hebben wij, Europeanen, de bijzondere plicht om de mensenrechten in de wereld te verdedigen en bevorderen. Ik wil graag kort iets zeggen over beide laureaten. De "Dames in het Wit" zijn vertegenwoordigd door mevrouw Blanca Reyes, zelf "Dame in het Wit", totdat er gelukkig een einde aan die status kwam toen haar man werd vrijgelaten. Ik heb destijds het genoegen gehad hem direct na zijn vrijlating namens u te ontvangen in dit Parlement. Deze vrouwen houden sinds maart 2003 iedere week in Havana een vreedzaam protest om uiting te geven aan hun solidariteit met vrienden en familie in gevangenschap. Zij nemen voor een belangrijk gedeelte het stokje over van de "Moeders van de Plaza de Mayo", aan wie wij ook een prijs hebben toegekend. De enige misdaad die de meeste van deze gevangenen op hun geweten hebben, is dat zij als gewone burgers, als onafhankelijke journalisten of als vreedzame dissidenten, in het openbaar oppositie tegen de regering hebben gevoerd. Velen van hen zijn tijdens hun gevangenschap ernstig ziek geworden onder omstandigheden die mevrouw Reyes ons zonder twijfel nog zal schetsen. Wij hebben in april 2004 om de vrijlating van deze gevangenen gevraagd. Helaas is daar nog lang geen sprake van, met uitzondering van een aantal individuele gevallen. Uit de ervaring van veel Europese landen blijkt dat het niet mogelijk is de voorwaarden voor een vreedzame overgang naar de democratie te scheppen door dissidenten op te sluiten. Integendeel. Laten we hopen dat men in Cuba bij de overgang naar de democratie goed gebruik zal weten te maken van de ervaring van een aantal Europese landen. Mevrouw Hauwa Ibrahim: U heeft uw talent als advocaat aangewend om de rechtsstaat te bevorderen. U vertelde mij vanochtend dat uw kracht ligt besloten in de eerbiediging van de rechtstaat. Wij bewonderen uw doorzettingsvermogen. Ik ben ervan overtuigd namens het gehele Europees Parlement te mogen spreken als ik zeg dat wij deze opstelling van de Cubaanse autoriteiten betreuren en afwijzen. In het uitgestrekte Nigeria verdedigt u burgers die bedreigd worden met wrede en onmenselijke straffen, straffen die in twaalf deelstaten van uw land volgens de sharia-wetgeving worden uitgevoerd. U vecht voor het recht van deze mensen op een eerlijke rechtszaak, in overeenstemming met de rechtsstaat. Weest u er alstublieft van overtuigd dat wij aangedaan en verontwaardigd waren toen wij de processen volgden tegen de van overspel beschuldigde Amina Lawal en Safya Hussaini. U heeft ervoor gezorgd dat het recht zegevierde. Daarmee eiste u respect voor de grondwet en de internationale verdragen die Nigeria ondertekend heeft. Het is onvoorstelbaar dat een van overspel beschuldigde vrouw nog steeds gestenigd kan worden. Het is onvoorstelbaar dat een van overspel beschuldigde vrouw gestenigd kan worden, zoals dat vroeger in de bijbel werd beschreven. Wij kunnen de verminking van jonge overtreders niet door de vingers zien. Het Parlement heeft zich tijdens vele gelegenheden krachtig uitgesproken tegen deze onmenselijke straffen en tegen de doodstraf. Mevrouw Ibrahim, wij staan achter u als het gaat om het veroordelen van deze wreedheid, en dat doen wij volledig. Wij bewonderen uw persoonlijke inzet. U zet zich met volle overtuiging in voor het recht op onderwijs voor de armen, en voor met name vrouwen, want armoede raakt hen het meest. U bent een voorbeeld voor alle Nigerianen die armoede en onwetendheid achter zich willen laten. Wij ontvangen vandaag ook Robert Ménard, secretaris-generaal van "Verslaggevers zonder Grenzen". Wij kennen hem in dit Parlement goed en met hem alle verslaggevers. Deze beroepsmensen zijn van levensbelang voor de vrijheid van informatie. Zij openen onze ogen voor een wrede wereld. Er kan geen sprake zijn van democratie zonder pluralistische informatie. Informatie is de grondstof en de belangrijkste brandstof voor een democratisch systeem. Democratie is niet levensvatbaar zonder informatie. Wij betonen eer aan hen die iedere dag, in alle delen van de wereld, strijden voor de verwezenlijking van dit principe; aan hen die zo vaak het slachtoffer worden omdat zij hun werk met passie doen. Helaas worden zij te vaak het slachtoffer omdat zij hun werk met passie doen. Een aantal dagen geleden werd Robert Ménard verboden om de top over de informatiemaatschappij in Tunesië bij te wonen. De Tunesische autoriteiten waren ongetwijfeld bang voor wat hij zou gaan zeggen. Het getuigt van grote tegenstrijdigheid dat dit juist gebeurt op het moment dat wij spreken over het recht op vrije toegang tot informatie voor iedereen. Ik zou u er graag aan willen herinneren dat in 2005, een jaar dat op zijn einde loopt, 58 journalisten hun leven hebben verloren. Elke week, om de zeven dagen, is een journalist gestorven terwijl hij zijn werk deed. In 2004 bedroeg dat aantal 53. Het aantal stijgt helaas. Ik wil hen allen en al hun gevangengenomen of verdwenen collega's eer bewijzen. Dit Parlement heeft actie ondernomen om hen te ondersteunen en zal dat blijven doen. Dictaturen houden niet eeuwig stand. Sommigen houden het lang vol, te lang, maar ze houden niet eeuwig stand. Ook terroristen zullen ons met hun meedogenloze acties niet het recht op informatie - de essentiële grondslag voor ons democratische bestaan - kunnen onthouden. Tijdens deze officiële gelegenheid zou ik willen spreken over de “Dames in het Wit” en onze redenen voor het toekennen van deze prijs aan hen. Tenslotte zou ik, alvorens het woord te geven aan onze laureaten en hun vertegenwoordigers, het gedachtegoed van Voltaire en Brecht willen combineren, van twee door vele jaren van elkaar gescheiden intellectuelen. De een zorgde voor licht; de ander leed in stilte. Zowel Voltaire als Brecht gebruikte eenzelfde uitdrukking. Ik ben er niet zeker van wie de meeste eer toekomt. Zij spraken deze woorden in verschillende tijdperken, op verschillende plaatsen en onder verschillende omstandigheden. Ik zou willen benadrukken dat de een voor licht zorgde en dat de andere zich staand hield in het duister. Beide spraken de woorden dat vrijheid van meningsuiting het enige recht is dat vrijheid en tirannie van elkaar scheiden. Dit niet accepteren betekent de mens aan de schandpaal nagelen. Wij feliciteren de laureaten met de moed die zij hebben betoond. Voltaire en Brecht kijken met ons mee. Ik dank u hartelijk. Mevrouw Blanca Reyes, het woord is aan u. Het is helaas niet de eerste keer dat dit gebeurt. Nelson Mandela, noch Aung San Suu Kyi, Leyla Zana, en Wei Jingshen waren in de gelegenheid hiernaartoe te komen om hun prijs in ontvangst te nemen. Hun vertegenwoordigers kwamen in hun plaats. Als zij daartoe de gelegenheid kregen - en enkelen onder hen hebben die nog niet gekregen, omdat ze gevangen zitten - zijn ze hier naar het Parlement gekomen, en wij zijn dan speciaal bijeengekomen om naar hen te luisteren. Zo is het gegaan met Nelson Mandela maar ook, meer recentelijk, met Leyla Zana. We zullen daarom op alle mogelijke manieren druk blijven uitoefenen op de Cubaanse autoriteiten opdat zij hen zullen toestaan te komen. Wanneer ze komen, zullen we, net als bij eerdere gelegenheden, een plechtige vergadering beleggen, zodat ze ons Parlement kunnen toespreken. We zullen alles in het werk stellen om ervoor te zorgen dat dit zo spoedig mogelijk gebeurt."@nl3
"Señoras y señores, estimados colegas, me complace mucho recibir, en nombre de todos ustedes, en nombre de todos nosotros, a los dos galardonados del Premio Sájarov 2005 que otorga el Parlamento Europeo y a la representante del tercer galardonado. Todos los galardonados de este año tienen en común su lucha por la libertad y la dignidad humana. Son dignos sucesores del académico soviético que da nombre al premio que concede el Parlamento Europeo. Los tres, cada uno a su manera, simbolizan la lucha por la afirmación de los derechos humanos en el mundo. La lucha frente a los regímenes que encarcelan a los críticos que tienen la osadía de criticarles. La lucha frente a leyes inhumanas. La lucha frente a los que niegan el derecho a la información y en contra de los terroristas que quieren hundir el derecho a la información en las tinieblas. El Parlamento Europeo ha apoyado a nuestros galardonados de este año a través de sus resoluciones y de sus iniciativas. Son bien conocidos por nosotros. Hemos seguido su trabajo, hemos seguido su lucha. Su presencia aquí no es sino el final de un proceso que hemos compartido a través de nuestras resoluciones. Es una lucha por un mundo más democrático y más justo. Permítanme decir, desde esta alta tribuna, que muchos europeos consideran que el derecho al respeto de los derechos humanos es algo natural, consustancial, que prácticamente es gratuito y que siempre ha sido así. En efecto, a pesar de todas las gestiones efectuadas hasta el último momento, desgraciadamente, las «Damas de Blanco» no han sido autorizadas a salir de Cuba para estar hoy con nosotros. No, ni siempre ha sido así, ni es así todavía, desgraciadamente, en muchas partes del mundo. Para la gran mayoría de la humanidad todavía es un sueño lejano. Y por eso, a nosotros, europeos, nos corresponde una especial responsabilidad en la defensa y en la promoción de los derechos humanos en todo el mundo. Permítanme un breve glosa de nuestros galardonados: las «Damas de Blanco» están representadas por la señora Blanca Reyes, que también ha sido «Dama de Blanco» hasta que, afortunadamente para ella, dejó de serlo, puesto que se consiguió la liberación de su esposo, al que tuve el placer de recibir en su nombre en este Parlamento inmediatamente después de que saliera de la cárcel. Estas damas se manifiestan pacíficamente todas las semanas del año en La Habana, para expresar su solidaridad con familiares y amigos encarcelados, desde marzo del 2003. De alguna manera son también las continuadoras del fenómeno que se conoció en su día como las «Madres de la Plaza de Mayo» que también fueron galardonadas por nosotros. El delito de muchos de estos prisioneros, de estos presos, no es sino el de expresar públicamente su oposición al poder como simples ciudadanos, como periodistas independientes o como disidentes pacíficos. Muchos de ellos han caído gravemente enfermos durante su detención en condiciones que, sin duda, la señora Reyes nos explicará. Hemos pedido la liberación de estos prisioneros en abril del año 2004 y todavía, desgraciadamente, hace falta mucho para conseguirlo, a pesar de algunos casos individuales que se han producido. La experiencia de muchos de los países europeos nos enseña que la transición a la democracia, una transición pacífica a la democracia, no se prepara precisamente encarcelando a los disidentes, sino todo lo contrario. Ojalá que la transición a la democracia en Cuba tome buena nota de la experiencia de algunos países europeos. Señora Hauwa Ibrahim: Usted ha puesto su talento de abogada al servicio del Estado de Derecho. Su fuerza, como me decía al recibirla esta mañana, es el respeto de la Ley. Admiramos su determinación. Creo poder hablar en nombre de todo el Parlamento Europeo para lamentar y rechazar esta actitud de las autoridades cubanas. En este inmenso país que es Nigeria, usted defiende a las personas que viven bajo la amenaza de penas crueles e inhumanas. De penas que se aplican en virtud de la «Sharia» en doce Estados de su país. Usted lucha por el derecho de esas personas a un juicio justo, de acuerdo con la ley. Hemos seguido, créame, con indignada emoción los procesos incoados contra Amina Lawal y Safya Hussaini, acusadas de adulterio. Usted consiguió que triunfara la ley, exigiendo el respeto de la Constitución y de los Tratados internacionales firmados por Nigeria. Es inconcebible que todavía se pueda lapidar a una mujer acusada de adulterio; Es inconcebible que se pueda lapidar a una mujer acusada de adulterio como en los tiempos bíblicos; no se puede condenar a la amputación a jóvenes incriminados. En repetidas ocasiones, este Parlamento se ha expresado con firmeza contra esas penas inhumanas y contra la pena de muerte. Señora Ibrahim: somos sus aliados en el rechazo de esta crueldad y seremos intransigentes en este rechazo. Admiramos su compromiso personal. El compromiso personal que usted expresa con una fuerte convicción: la del derecho a la educación de los pobres, especialmente, de las mujeres, porque la pobreza se ceba especialmente en la mujer. Es usted un ejemplo para todas las nigerianas que quieren salir de la pobreza y la ignorancia. También recibimos hoy a Robert Ménard, conocido de esta casa, secretario general de Reporteros sin Fronteras, y, con él, a todos los periodistas. A unos profesionales que insuflan vida a la libertad de información, que nos abren los ojos a un mundo cruel. No puede haber democracia sin una información plural. La democracia es un sistema que tiene a la información como materia prima, como combustible primario. Sin él no puede haber democracia. Rendimos homenaje a los que luchan para hacer realidad todos los días, en todas las partes del mundo este principio. A aquellos que con demasiada frecuencia caen víctimas de la entrega apasionada a su profesión. Por desgracia, demasiado a menudo caen víctimas de la entrega apasionada a su profesión. Hace muy pocas semanas, a Robert Ménard le fue negada la autorización para acudir a la Cumbre de la Información que se celebraba en Túnez. Las autoridades tunecinas temían, sin duda, su testimonio. No deja de ser paradójico que esto ocurra precisamente cuando se habla del derecho al acceso a información libre para todos. Permítanme recordarles que en el año 2005, que ahora acaba, han perdido la vida 58 periodistas, uno cada semana del año, cada siete días muere un periodista en el ejercicio de sus funciones. En el 2004 fueron 53. Desgraciadamente, la cifra aumenta. Quiero rendir hoy homenaje a todos ellos, y a todos sus compañeros encarcelados o desaparecidos. Este Parlamento se ha movilizado y se movilizará siempre a su favor. Porque las dictaduras no duran eternamente. Algunas duran mucho, demasiado, pero no duran eternamente. Con sus actos crueles, tampoco los terroristas conseguirán suprimir la libertad de información, base imprescindible de nuestra vida democrática. En este momento solemne quiero recordar a las «Damas de Blanco» y las razones por las cuales han sido galardonadas por el Parlamento Europeo. Para terminar, y antes de dar la palabra a nuestros galardonados y a su representante quiero unir en una misma cita a Voltaire y a Brecht. Dos intelectuales separados por muchos años. Uno que abrió las luces y otro que sufrió las tinieblas. Voltaire y Brecht, los dos, coinciden en una expresión, que no sabría muy bien a quien atribuir prioritariamente. Lo dijeron en distintas épocas y distintos lugares y desde distintas situaciones. Insisto, uno abriendo la luz y otro soportando las tinieblas. Ambos dijeron que la libertad de expresión es el único derecho que separa la libertad de la tiranía. Y no aceptarlo es condenar al ser humano en el oprobio. Enhorabuena a nuestros galardonados por el coraje que han demostrado. Voltaire y Brecht nos están observando Muchas gracias. Señora Blanca Reyes, tiene usted la palabra. Desgraciadamente no es la primera vez que ocurre, ni Nelson Mandela, ni Aung San Suu Kyi, ni Leyla Zana, ni Wei Jingshen pudieron acudir en su día a recoger su premio. Sus representantes acudieron aquí para hacerlo. Y cuando pudieron hacerlo, y algunos todavía no han podido porque siguen detenidos, vinieron a la Cámara y nos reunimos expresamente para escucharles. Este fue el caso de Nelson Mandela y, más recientemente, de Leyla Zana. Por lo tanto, seguiremos haciendo toda la presión sobre las autoridades cubanas para que puedan venir, y cuando vengan organizaremos, como hemos hecho en otras ocasiones, una sesión solemne para que puedan dirigirse a nuestro Pleno y haremos lo posible para que esto sea cuanto antes."@pl16
"Senhoras e Senhores Deputados, congratulo-me por dar as boas-vindas, em nome de todos vós, em nome de todos nós, aos dois galardoados com o Prémio Sakharov 2005 concedido pelo Parlamento Europeu e ao representante do terceiro galardoado. Todos os galardoados deste ano têm em comum a sua luta em prol da dignidade humana e da liberdade. São sucessores dignos do académico soviético que dá nome ao prémio atribuído pelo Parlamento Europeu. Os três, cada um à sua maneira, simbolizam a luta pela consolidação dos direitos humanos no mundo. A luta contra regimes que enviam para a prisão os críticos que ousam criticá-los. A luta contra as leis desumanas. A luta contra os que negam o direito à informação e contra os terroristas que querem banir o direito à informação. O Parlamento Europeu apoiou os galardoados deste ano através das suas resoluções e das suas iniciativas. São nossos conhecidos. Acompanhámos o seu trabalho, acompanhámos a sua luta. A sua presença aqui é simplesmente o culminar de um processo que partilhámos através das nossas resoluções. É uma luta em prol de um mundo mais democrático e mais justo. Permitam-me que recorde, aqui nesta estimada Câmara, que muitos europeus estão convencidos de que o direito ao respeito dos direitos humanos é algo natural, consubstancial, que é praticamente gratuito e que sempre foi assim. Lamentavelmente, apesar de todas as diligências efectuadas até ao último minuto, as "Mulheres de Branco" não foram autorizadas a sair de Cuba para estar hoje entre nós. Não, nem sempre foi assim, nem é ainda assim, lamentavelmente, em muitas partes do mundo. Para a grande maioria da humanidade ainda é um sonho distante. Razão pela qual, nós, europeus, temos um dever especial de defender e promover os direitos humanos no mundo. Permitam-me umas breves palavras sobre cada um dos nossos galardoados: as "Mulheres de Branco" estão representadas pela Srª Blanca Reyes, que foi uma "Mulher de Branco" até, felizmente, deixar de o ser aquando da libertação do seu marido, a quem tive o prazer de receber, em nome deste Parlamento, imediatamente depois de ser libertado da prisão. Estas mulheres manifestam-se pacificamente todas as semanas em Havana, para expressar a sua solidariedade com familiares e amigos presos, desde Março do 2003. De certa forma, perpetuam o fenómeno que ficou conhecido na altura como as «Mães da Praça de Maio», a quem também outorgámos um prémio. O único crime de muitos destes presos é o de manifestar publicamente a sua oposição ao governo como cidadãos comuns, como jornalistas independentes ou como dissidentes pacíficos. Muitos deles adoeceram gravemente durante a sua detenção em condições que a Srª Reyes irá certamente descrever-nos. Solicitámos a libertação destes presos em Abril de 2004 e, lamentavelmente, ainda falta muito para que isso aconteça, apesar de alguns casos individuais que surgiram. A experiência de muitos países europeus mostra-nos que não é possível estabelecer as condições para a transição para a democracia, uma transição pacífica para a democracia, prendendo os dissidentes, mas sim o contrário. Esperemos que a transição para a democracia em Cuba tome boa nota da experiência de alguns países europeus. Senhora Hauwa Ibrahim: A senhora recorreu ao seu talento como advogada para promover o Estado de direito. A sua força, como me disse quando a recebi esta manhã, reside no respeito da lei. Admiramos a sua determinação. Penso poder dizer em nome de todo o Parlamento Europeu que lamentamos e repudiamos esta atitude das autoridades cubanas. Nesse imenso país que é a Nigéria, a senhora defende as pessoas que vivem sob a ameaça de penas cruéis e desumanas. Penas que são aplicadas de acordo com a em doze Estados do seu país. Luta pelo direito dessas pessoas a um julgamento justo, de acordo com a lei. Pode crer que nos sentimos emocionados e indignados ao ver os processos contra Amina Lawal e Safya Hussaini, acusadas de adultério. A senhora conseguiu fazer prevalecer a lei, exigindo o respeito pela Constituição e pelos Tratados internacionais assinados pela Nigéria. É inconcebível que seja ainda possível lapidar uma mulher acusada de adultério. É inconcebível que seja possível lapidar uma mulher acusada de adultério como nos tempos bíblicos; não podemos consentir a amputação de jovens delinquentes. Este Parlamento manifestou-se firmemente contra essas penas desumanas e contra a pena de morte em repetidas ocasiões. Senhora Ibrahim, comungamos o seu repúdio por esta crueldade e seremos intransigentes neste repúdio. Admiramos o seu compromisso pessoal. O compromisso pessoal que exprime com uma forte convicção: a do direito à educação dos pobres, em especial das mulheres, porque a pobreza afecta em particular as mulheres. A senhora é um exemplo para todas as nigerianas que querem sair da pobreza e da ignorância. Recebemos também hoje Robert Ménard, conhecido desta Câmara, Secretário-geral dos Repórteres sem Fronteiras, e, através dele, todos os jornalistas. Estes profissionais insuflam vida à liberdade de informação e abrem os nossos olhos a um mundo cruel. Não pode haver democracia sem informação plural. A informação é a matéria-prima, o combustível primário, do sistema democrático. Sem ela, não pode haver democracia. Prestamos homenagem a todos os que lutam todos os dias, em todas as partes do mundo, para tornar este princípio uma realidade. Àqueles que, com demasiada frequência, são vítimas da sua entrega apaixonada à sua profissão. Lamentavelmente, é com demasiada frequência que são vítimas da sua entrega apaixonada à sua profissão. Há escassas semanas, foi recusada autorização a Robert Ménard para assistir à Cimeira da Informação que estava a realizar-se na Tunísia. As autoridades tunisinas temiam, sem dúvida, o seu testemunho. É um grande paradoxo que isto aconteça precisamente quando se fala do direito ao acesso à informação livre para todos. Permitam-me recordar que em 2005, ano que agora chega ao fim, perderam a vida 58 jornalistas, um por semana, de sete em sete dias morre um jornalista no exercício das suas funções. Em 2004 registaram-se 53 mortes. Lamentavelmente, o número aumenta. Gostaria de prestar homenagem a todos eles, e a todos os seus colegas presos ou desaparecidos. Este Parlamento mobilizou-se e mobilizar-se-á sempre a seu favor. Porque as ditaduras não duram eternamente. Algumas duram muito, demasiado, mas não duram eternamente. Com os seus actos cruéis, os terroristas também não nos negarão a liberdade de informação, a base essencial da nossa vida democrática. Neste momento solene, gostaria de falar sobre as "Mulheres de Branco" e as razões que nos levaram a atribuir-lhes este prémio. Para terminar, e antes de conceder a palavra aos nossos galardoados e aos seus representantes, desejo unir os pensamentos de Voltaire e de Brecht. Dois intelectuais separados por muitos anos. Um deles abriu as luzes e o outro sofreu nas trevas. Tanto Voltaire como Brecht usaram uma expressão similar, e não estou muito certo a qual deles deve atribuir-se primordialmente. Disseram-no em épocas diferentes e em lugares diferentes e em situações diferentes. Insisto, um deles abriu a luz e o outro suportou as trevas. Ambos disseram que a liberdade de expressão é o único direito que separa a liberdade da tirania. E não aceitar isto é condenar o ser humano à ignomínia. Parabéns aos nossos galardoados pela coragem que demonstraram. Voltaire e Brecht estão a observar-nos. Muito obrigado. Senhora Blanca Reyes, tem a palavra. Esta não é, lamentavelmente, a primeira vez que esta situação acontece. Nelson Mandela, Aung San Suu Kyi, Leyla Zana e Wei Jingshen também não puderam deslocar-se aqui para receber o seu prémio. Os seus representantes vieram em seu lugar. Quando puderam fazê-lo - alguns ainda não puderam porque continuam detidos -, vieram ao Parlamento e reunimo-nos expressamente para os ouvir. Foi o que aconteceu no caso de Nelson Mandela e, mais recentemente, de Leyla Zana. Devemos, por conseguinte, continuar a exercer toda a pressão sobre as autoridades cubanas para que autorizem a sua vinda e, quando vierem, organizaremos, à semelhança de outras ocasiões no passado, uma sessão solene para que possam dirigir-se ao nosso Parlamento, e faremos tudo para que isso aconteça o mais brevemente possível."@pt17
"Señoras y señores, estimados colegas, me complace mucho recibir, en nombre de todos ustedes, en nombre de todos nosotros, a los dos galardonados del Premio Sájarov 2005 que otorga el Parlamento Europeo y a la representante del tercer galardonado. Todos los galardonados de este año tienen en común su lucha por la libertad y la dignidad humana. Son dignos sucesores del académico soviético que da nombre al premio que concede el Parlamento Europeo. Los tres, cada uno a su manera, simbolizan la lucha por la afirmación de los derechos humanos en el mundo. La lucha frente a los regímenes que encarcelan a los críticos que tienen la osadía de criticarles. La lucha frente a leyes inhumanas. La lucha frente a los que niegan el derecho a la información y en contra de los terroristas que quieren hundir el derecho a la información en las tinieblas. El Parlamento Europeo ha apoyado a nuestros galardonados de este año a través de sus resoluciones y de sus iniciativas. Son bien conocidos por nosotros. Hemos seguido su trabajo, hemos seguido su lucha. Su presencia aquí no es sino el final de un proceso que hemos compartido a través de nuestras resoluciones. Es una lucha por un mundo más democrático y más justo. Permítanme decir, desde esta alta tribuna, que muchos europeos consideran que el derecho al respeto de los derechos humanos es algo natural, consustancial, que prácticamente es gratuito y que siempre ha sido así. En efecto, a pesar de todas las gestiones efectuadas hasta el último momento, desgraciadamente, las «Damas de Blanco» no han sido autorizadas a salir de Cuba para estar hoy con nosotros. No, ni siempre ha sido así, ni es así todavía, desgraciadamente, en muchas partes del mundo. Para la gran mayoría de la humanidad todavía es un sueño lejano. Y por eso, a nosotros, europeos, nos corresponde una especial responsabilidad en la defensa y en la promoción de los derechos humanos en todo el mundo. Permítanme un breve glosa de nuestros galardonados: las «Damas de Blanco» están representadas por la señora Blanca Reyes, que también ha sido «Dama de Blanco» hasta que, afortunadamente para ella, dejó de serlo, puesto que se consiguió la liberación de su esposo, al que tuve el placer de recibir en su nombre en este Parlamento inmediatamente después de que saliera de la cárcel. Estas damas se manifiestan pacíficamente todas las semanas del año en La Habana, para expresar su solidaridad con familiares y amigos encarcelados, desde marzo del 2003. De alguna manera son también las continuadoras del fenómeno que se conoció en su día como las «Madres de la Plaza de Mayo» que también fueron galardonadas por nosotros. El delito de muchos de estos prisioneros, de estos presos, no es sino el de expresar públicamente su oposición al poder como simples ciudadanos, como periodistas independientes o como disidentes pacíficos. Muchos de ellos han caído gravemente enfermos durante su detención en condiciones que, sin duda, la señora Reyes nos explicará. Hemos pedido la liberación de estos prisioneros en abril del año 2004 y todavía, desgraciadamente, hace falta mucho para conseguirlo, a pesar de algunos casos individuales que se han producido. La experiencia de muchos de los países europeos nos enseña que la transición a la democracia, una transición pacífica a la democracia, no se prepara precisamente encarcelando a los disidentes, sino todo lo contrario. Ojalá que la transición a la democracia en Cuba tome buena nota de la experiencia de algunos países europeos. Señora Hauwa Ibrahim: Usted ha puesto su talento de abogada al servicio del Estado de Derecho. Su fuerza, como me decía al recibirla esta mañana, es el respeto de la Ley. Admiramos su determinación. Creo poder hablar en nombre de todo el Parlamento Europeo para lamentar y rechazar esta actitud de las autoridades cubanas. En este inmenso país que es Nigeria, usted defiende a las personas que viven bajo la amenaza de penas crueles e inhumanas. De penas que se aplican en virtud de la «Sharia» en doce Estados de su país. Usted lucha por el derecho de esas personas a un juicio justo, de acuerdo con la ley. Hemos seguido, créame, con indignada emoción los procesos incoados contra Amina Lawal y Safya Hussaini, acusadas de adulterio. Usted consiguió que triunfara la ley, exigiendo el respeto de la Constitución y de los Tratados internacionales firmados por Nigeria. Es inconcebible que todavía se pueda lapidar a una mujer acusada de adulterio; Es inconcebible que se pueda lapidar a una mujer acusada de adulterio como en los tiempos bíblicos; no se puede condenar a la amputación a jóvenes incriminados. En repetidas ocasiones, este Parlamento se ha expresado con firmeza contra esas penas inhumanas y contra la pena de muerte. Señora Ibrahim: somos sus aliados en el rechazo de esta crueldad y seremos intransigentes en este rechazo. Admiramos su compromiso personal. El compromiso personal que usted expresa con una fuerte convicción: la del derecho a la educación de los pobres, especialmente, de las mujeres, porque la pobreza se ceba especialmente en la mujer. Es usted un ejemplo para todas las nigerianas que quieren salir de la pobreza y la ignorancia. También recibimos hoy a Robert Ménard, conocido de esta casa, secretario general de Reporteros sin Fronteras, y, con él, a todos los periodistas. A unos profesionales que insuflan vida a la libertad de información, que nos abren los ojos a un mundo cruel. No puede haber democracia sin una información plural. La democracia es un sistema que tiene a la información como materia prima, como combustible primario. Sin él no puede haber democracia. Rendimos homenaje a los que luchan para hacer realidad todos los días, en todas las partes del mundo este principio. A aquellos que con demasiada frecuencia caen víctimas de la entrega apasionada a su profesión. Por desgracia, demasiado a menudo caen víctimas de la entrega apasionada a su profesión. Hace muy pocas semanas, a Robert Ménard le fue negada la autorización para acudir a la Cumbre de la Información que se celebraba en Túnez. Las autoridades tunecinas temían, sin duda, su testimonio. No deja de ser paradójico que esto ocurra precisamente cuando se habla del derecho al acceso a información libre para todos. Permítanme recordarles que en el año 2005, que ahora acaba, han perdido la vida 58 periodistas, uno cada semana del año, cada siete días muere un periodista en el ejercicio de sus funciones. En el 2004 fueron 53. Desgraciadamente, la cifra aumenta. Quiero rendir hoy homenaje a todos ellos, y a todos sus compañeros encarcelados o desaparecidos. Este Parlamento se ha movilizado y se movilizará siempre a su favor. Porque las dictaduras no duran eternamente. Algunas duran mucho, demasiado, pero no duran eternamente. Con sus actos crueles, tampoco los terroristas conseguirán suprimir la libertad de información, base imprescindible de nuestra vida democrática. En este momento solemne quiero recordar a las «Damas de Blanco» y las razones por las cuales han sido galardonadas por el Parlamento Europeo. Para terminar, y antes de dar la palabra a nuestros galardonados y a su representante quiero unir en una misma cita a Voltaire y a Brecht. Dos intelectuales separados por muchos años. Uno que abrió las luces y otro que sufrió las tinieblas. Voltaire y Brecht, los dos, coinciden en una expresión, que no sabría muy bien a quien atribuir prioritariamente. Lo dijeron en distintas épocas y distintos lugares y desde distintas situaciones. Insisto, uno abriendo la luz y otro soportando las tinieblas. Ambos dijeron que la libertad de expresión es el único derecho que separa la libertad de la tiranía. Y no aceptarlo es condenar al ser humano en el oprobio. Enhorabuena a nuestros galardonados por el coraje que han demostrado. Voltaire y Brecht nos están observando Muchas gracias. Señora Blanca Reyes, tiene usted la palabra. Desgraciadamente no es la primera vez que ocurre, ni Nelson Mandela, ni Aung San Suu Kyi, ni Leyla Zana, ni Wei Jingshen pudieron acudir en su día a recoger su premio. Sus representantes acudieron aquí para hacerlo. Y cuando pudieron hacerlo, y algunos todavía no han podido porque siguen detenidos, vinieron a la Cámara y nos reunimos expresamente para escucharles. Este fue el caso de Nelson Mandela y, más recientemente, de Leyla Zana. Por lo tanto, seguiremos haciendo toda la presión sobre las autoridades cubanas para que puedan venir, y cuando vengan organizaremos, como hemos hecho en otras ocasiones, una sesión solemne para que puedan dirigirse a nuestro Pleno y haremos lo posible para que esto sea cuanto antes."@sk18
"Señoras y señores, estimados colegas, me complace mucho recibir, en nombre de todos ustedes, en nombre de todos nosotros, a los dos galardonados del Premio Sájarov 2005 que otorga el Parlamento Europeo y a la representante del tercer galardonado. Todos los galardonados de este año tienen en común su lucha por la libertad y la dignidad humana. Son dignos sucesores del académico soviético que da nombre al premio que concede el Parlamento Europeo. Los tres, cada uno a su manera, simbolizan la lucha por la afirmación de los derechos humanos en el mundo. La lucha frente a los regímenes que encarcelan a los críticos que tienen la osadía de criticarles. La lucha frente a leyes inhumanas. La lucha frente a los que niegan el derecho a la información y en contra de los terroristas que quieren hundir el derecho a la información en las tinieblas. El Parlamento Europeo ha apoyado a nuestros galardonados de este año a través de sus resoluciones y de sus iniciativas. Son bien conocidos por nosotros. Hemos seguido su trabajo, hemos seguido su lucha. Su presencia aquí no es sino el final de un proceso que hemos compartido a través de nuestras resoluciones. Es una lucha por un mundo más democrático y más justo. Permítanme decir, desde esta alta tribuna, que muchos europeos consideran que el derecho al respeto de los derechos humanos es algo natural, consustancial, que prácticamente es gratuito y que siempre ha sido así. En efecto, a pesar de todas las gestiones efectuadas hasta el último momento, desgraciadamente, las «Damas de Blanco» no han sido autorizadas a salir de Cuba para estar hoy con nosotros. No, ni siempre ha sido así, ni es así todavía, desgraciadamente, en muchas partes del mundo. Para la gran mayoría de la humanidad todavía es un sueño lejano. Y por eso, a nosotros, europeos, nos corresponde una especial responsabilidad en la defensa y en la promoción de los derechos humanos en todo el mundo. Permítanme un breve glosa de nuestros galardonados: las «Damas de Blanco» están representadas por la señora Blanca Reyes, que también ha sido «Dama de Blanco» hasta que, afortunadamente para ella, dejó de serlo, puesto que se consiguió la liberación de su esposo, al que tuve el placer de recibir en su nombre en este Parlamento inmediatamente después de que saliera de la cárcel. Estas damas se manifiestan pacíficamente todas las semanas del año en La Habana, para expresar su solidaridad con familiares y amigos encarcelados, desde marzo del 2003. De alguna manera son también las continuadoras del fenómeno que se conoció en su día como las «Madres de la Plaza de Mayo» que también fueron galardonadas por nosotros. El delito de muchos de estos prisioneros, de estos presos, no es sino el de expresar públicamente su oposición al poder como simples ciudadanos, como periodistas independientes o como disidentes pacíficos. Muchos de ellos han caído gravemente enfermos durante su detención en condiciones que, sin duda, la señora Reyes nos explicará. Hemos pedido la liberación de estos prisioneros en abril del año 2004 y todavía, desgraciadamente, hace falta mucho para conseguirlo, a pesar de algunos casos individuales que se han producido. La experiencia de muchos de los países europeos nos enseña que la transición a la democracia, una transición pacífica a la democracia, no se prepara precisamente encarcelando a los disidentes, sino todo lo contrario. Ojalá que la transición a la democracia en Cuba tome buena nota de la experiencia de algunos países europeos. Señora Hauwa Ibrahim: Usted ha puesto su talento de abogada al servicio del Estado de Derecho. Su fuerza, como me decía al recibirla esta mañana, es el respeto de la Ley. Admiramos su determinación. Creo poder hablar en nombre de todo el Parlamento Europeo para lamentar y rechazar esta actitud de las autoridades cubanas. En este inmenso país que es Nigeria, usted defiende a las personas que viven bajo la amenaza de penas crueles e inhumanas. De penas que se aplican en virtud de la «Sharia» en doce Estados de su país. Usted lucha por el derecho de esas personas a un juicio justo, de acuerdo con la ley. Hemos seguido, créame, con indignada emoción los procesos incoados contra Amina Lawal y Safya Hussaini, acusadas de adulterio. Usted consiguió que triunfara la ley, exigiendo el respeto de la Constitución y de los Tratados internacionales firmados por Nigeria. Es inconcebible que todavía se pueda lapidar a una mujer acusada de adulterio; Es inconcebible que se pueda lapidar a una mujer acusada de adulterio como en los tiempos bíblicos; no se puede condenar a la amputación a jóvenes incriminados. En repetidas ocasiones, este Parlamento se ha expresado con firmeza contra esas penas inhumanas y contra la pena de muerte. Señora Ibrahim: somos sus aliados en el rechazo de esta crueldad y seremos intransigentes en este rechazo. Admiramos su compromiso personal. El compromiso personal que usted expresa con una fuerte convicción: la del derecho a la educación de los pobres, especialmente, de las mujeres, porque la pobreza se ceba especialmente en la mujer. Es usted un ejemplo para todas las nigerianas que quieren salir de la pobreza y la ignorancia. También recibimos hoy a Robert Ménard, conocido de esta casa, secretario general de Reporteros sin Fronteras, y, con él, a todos los periodistas. A unos profesionales que insuflan vida a la libertad de información, que nos abren los ojos a un mundo cruel. No puede haber democracia sin una información plural. La democracia es un sistema que tiene a la información como materia prima, como combustible primario. Sin él no puede haber democracia. Rendimos homenaje a los que luchan para hacer realidad todos los días, en todas las partes del mundo este principio. A aquellos que con demasiada frecuencia caen víctimas de la entrega apasionada a su profesión. Por desgracia, demasiado a menudo caen víctimas de la entrega apasionada a su profesión. Hace muy pocas semanas, a Robert Ménard le fue negada la autorización para acudir a la Cumbre de la Información que se celebraba en Túnez. Las autoridades tunecinas temían, sin duda, su testimonio. No deja de ser paradójico que esto ocurra precisamente cuando se habla del derecho al acceso a información libre para todos. Permítanme recordarles que en el año 2005, que ahora acaba, han perdido la vida 58 periodistas, uno cada semana del año, cada siete días muere un periodista en el ejercicio de sus funciones. En el 2004 fueron 53. Desgraciadamente, la cifra aumenta. Quiero rendir hoy homenaje a todos ellos, y a todos sus compañeros encarcelados o desaparecidos. Este Parlamento se ha movilizado y se movilizará siempre a su favor. Porque las dictaduras no duran eternamente. Algunas duran mucho, demasiado, pero no duran eternamente. Con sus actos crueles, tampoco los terroristas conseguirán suprimir la libertad de información, base imprescindible de nuestra vida democrática. En este momento solemne quiero recordar a las «Damas de Blanco» y las razones por las cuales han sido galardonadas por el Parlamento Europeo. Para terminar, y antes de dar la palabra a nuestros galardonados y a su representante quiero unir en una misma cita a Voltaire y a Brecht. Dos intelectuales separados por muchos años. Uno que abrió las luces y otro que sufrió las tinieblas. Voltaire y Brecht, los dos, coinciden en una expresión, que no sabría muy bien a quien atribuir prioritariamente. Lo dijeron en distintas épocas y distintos lugares y desde distintas situaciones. Insisto, uno abriendo la luz y otro soportando las tinieblas. Ambos dijeron que la libertad de expresión es el único derecho que separa la libertad de la tiranía. Y no aceptarlo es condenar al ser humano en el oprobio. Enhorabuena a nuestros galardonados por el coraje que han demostrado. Voltaire y Brecht nos están observando Muchas gracias. Señora Blanca Reyes, tiene usted la palabra. Desgraciadamente no es la primera vez que ocurre, ni Nelson Mandela, ni Aung San Suu Kyi, ni Leyla Zana, ni Wei Jingshen pudieron acudir en su día a recoger su premio. Sus representantes acudieron aquí para hacerlo. Y cuando pudieron hacerlo, y algunos todavía no han podido porque siguen detenidos, vinieron a la Cámara y nos reunimos expresamente para escucharles. Este fue el caso de Nelson Mandela y, más recientemente, de Leyla Zana. Por lo tanto, seguiremos haciendo toda la presión sobre las autoridades cubanas para que puedan venir, y cuando vengan organizaremos, como hemos hecho en otras ocasiones, una sesión solemne para que puedan dirigirse a nuestro Pleno y haremos lo posible para que esto sea cuanto antes."@sl19
"Mina damer och herrar! Det är med stor glädje som jag på våra gemensamma vägnar välkomnar de två vinnarna av Europaparlamentets Sacharovpris 2005 och företrädaren för den tredje pristagaren. Det som samtliga årets pristagare har gemensamt är deras kamp för mänsklig värdighet och frihet. De är värdiga efterträdare till den sovjetiske akademiker vars namn pryder det pris som Europaparlamentet delar ut. På sina olika sätt symboliserar alla tre kampen för att stärka de mänskliga rättigheterna i världen. Kampen mot regimer som fängslar kritiker som vågar kritisera dem. Kampen mot inhumana lagar. Kampen mot dem som vägrar rätten till information och mot terrorister som vill förbjuda rätten till information. Europaparlamentet har stött årets pristagare i sina resolutioner och initiativ. De är alla välkända för oss. Vi har följt deras arbete, vi har följt deras kamp. Deras närvaro här är bara slutet på en process som vi har varit delaktiga i genom våra resolutioner. Det är en kamp för en mer demokratisk och rättvisare värld. Här i denna högt aktade kammare skulle jag vilja påminna om att många européer tror att rätten att få sina mänskliga rättigheter respekterade är något naturligt, något ofrånkomligt, något som är praktiskt taget gratis och att så alltid har varit fallet. Trots alla ansträngningar som in i det sista har gjorts har ”Kvinnor i vitt” tyvärr inte fått tillåtelse att lämna Kuba för att närvara här i dag. Men nej, så har inte alltid varit fallet, och så är tyvärr fortfarande inte fallet i många delar av världen. För majoriteten av mänskligheten är detta fortfarande en avlägsen dröm. Därför har vi européer en särskild skyldighet att försvara och främja de mänskliga rättigheterna i världen. Jag skulle kort vilja nämna något om var och en av våra pristagare: ”Kvinnor i vitt” företräds av Blanca Reyes. Hon tillhörde ”Kvinnor i vitt” ända tills detta lyckligtvis inte behövdes längre eftersom hennes man frigavs. Jag hade äran att på era vägnar ta emot henne här i parlamentet omedelbart efter det att han frigetts från fängelset. Dessa kvinnor deltar varje vecka i fredliga demonstrationer i Havanna för att visa sin solidaritet med släktingar och vänner som har suttit fängslade sedan mars 2003. Till viss del är de en fortsättning på det fenomen som på sin tid var känt som ”Mödrarna på Plaza de Mayo”, som vi också gav ett pris. Det enda brott som många av dessa fångar har gjort sig skyldiga till är att som vanliga medborgare, oberoende journalister eller fredliga oliktänkande offentligt kritisera regeringen. Många av dem har blivit allvarligt sjuka under sin tid i fångenskap under förhållanden som Blanca Reyes säkert kommer att beskriva för oss. I april 2004 krävde vi att dessa fångar skulle friges. Trots vissa enstaka framgångar är det tyvärr fortfarande långt kvar innan detta krav uppfylls. Erfarenheten från flera europeiska länder visar att det inte går att skapa förutsättningar för en övergång till demokrati, en fredlig övergång till demokrati, genom att fängsla oliktänkande, tvärtom. Låt oss hoppas att man vid övergången till demokrati i Kuba tar lärdom av vissa europeiska länders erfarenhet. Hauwa Ibrahim: Ni har använt era talanger som advokat för att främja rättsstatsprincipen. Er styrka ligger i er respekt för lagen, som ni sa till mig när vi träffades i morse. Vi beundrar er beslutsamhet. Jag tror att jag talar för hela Europaparlamentet när jag säger att vi beklagar detta och förkastar de kubanska myndigheternas inställning i denna fråga. I det oerhört stora landet Nigeria försvarar ni människor som lever med hotet om grymma och omänskliga bestraffningar. Bestraffningar som tillämpas i enlighet med Sharialagar i tolv delstater i ert land. Ni kämpar för dessa människors rätt till en rättvis rättegång, i enlighet med lagen. Vi blev verkligen berörda och indignerade när vi såg rättegången mot Amina Lawal och Safya Hussaini, som anklagades för äktenskapsbrott. Ni såg till att lagen segrade och krävde att man respekterade konstitutionen och de internationella fördrag som Nigeria har undertecknat. Det är ofattbart att en kvinna som anklagas för äktenskapsbrott fortfarande kan stenas. Det är ofattbart att en kvinna som anklagas för äktenskapsbrott kan stenas som i biblisk tid. Vi kan inte tolerera att unga brottslingar amputeras. Parlamentet har vid många tillfällen kraftfullt kritiserat dessa omänskliga bestraffningar och dödsstraffet. Fru Ibrahim! Vi stöder ert förkastande av dessa grymheter och vårt förkastande är totalt. Vi beundrar ert personliga engagemang. Det personliga engagemang som ni visar med så stor övertygelse: engagemanget för rätten till utbildning för fattiga, särskilt kvinnor, eftersom fattigdom framför allt drabbar kvinnor. Ni är ett föredöme för alla nigerianer som vill lämna fattigdom och okunnighet bakom sig. Vi hälsar även Robert Ménard välkommen hit i dag och med honom alla journalister. Robert Ménard är välkänd för oss här i parlamentet som generalsekreterare i organisationen Reportrar utan gränser. Dessa yrkesmän aktualiserar informationsfriheten och öppnar våra ögon för en grym värld. Demokrati kan inte existera utan informationsmångfald. Information är det demokratiska systemets råmaterial, dess huvudbränsle. Utan detta kan demokratin inte existera. Vi hedrar dem som kämpar varje dag, i alla delar av världen, för att förverkliga denna princip. Alla dem som alltför ofta faller offer för sin brinnande längtan att fullgöra sitt uppdrag. Tyvärr faller de alltför ofta offer för sin brinnande längtan att fullgöra sitt uppdrag. För några veckor sedan nekades Robert Ménard tillstånd att närvara vid det toppmöte om informationssamhället som ägde rum i Tunisien. De tunisiska myndigheterna var säkert rädda för vad han skulle kunna säga. Det är en stor paradox att detta sker just nu när vi diskuterar rätten till fri tillgång till information för alla. Jag skulle vilja påminna er om att under 2005, som går mot sitt slut, har 58 journalister mist livet, en varje vecka under året. Var sjunde dag dör en journalist när han eller hon utövar sitt yrke. Under 2004 var denna siffra 53. Tyvärr ökar den. Jag skulle vilja hedra dem alla, och alla deras fängslade eller försvunna kolleger. Parlamentet har stött och kommer alltid att stödja dem. För diktaturer varar inte för evigt. Vissa varar länge – alltför länge – men de varar inte för evigt. Inte heller terroristerna kommer att genom sina brutala attacker kunna förvägra oss informationsfrihet, själva grunden för vårt demokratiska liv. Vid detta högtidliga tillfälle skulle jag vilja berätta om ”Kvinnor i vitt” och varför vi tilldelar dem detta pris. Avslutningsvis, och innan jag ger ordet till våra pristagare och deras företrädare, skulle jag vilja kombinera Voltaires och Brechts tankar. Två intellektuella män som levde under två olika historiska perioder. En av dem tände ljuset och den andre led i skuggorna. Både Voltaire och Brecht använde ett likartat uttryck och jag är inte säker på vem av dem som bör tillskrivas den största äran. De använde det under olika tidsepoker, på olika platser och under olika omständigheter. Jag hävdar bestämt att en av dem tände ljuset och att den andre kämpade i skuggorna. Båda sa att yttrandefrihet är den enda rättighet som skiljer frihet från tyranni. Att inte acceptera detta är en skymf mot människan. Jag gratulerar våra pristagare till det mod de har visat. Voltaire och Brecht betraktar oss. Tack så mycket. Fru Reyes, ni har ordet. Tyvärr är det inte första gången som detta sker. Varken Nelson Mandela, Aung San Suu Kyi, Leyla Zana eller Wei Jingsheng kunde komma hit för att ta emot sitt pris. Deras företrädare kom i stället för dem. När de fick tillfälle – några har inte fått tillfälle än eftersom de fortfarande sitter fängslade – besökte de parlamentet och vi anordnade ett särskilt sammanträde för att lyssna till dem. Nelson Mandela och senare Leyla Zana gjorde på detta sätt. Vi kommer därför att använda oss av alla de påtryckningsmedel vi har för att förmå de kubanska myndigheterna att ge dem tillåtelse att komma. När de kommer ska vi precis som tidigare anordna ett högtidligt sammanträde så att de kan hålla ett anförande i kammaren. Vi kommer att göra allt vi kan för att se till att detta sker så snart som möjligt."@sv21
lpv:unclassifiedMetadata
"(Aplausos)"5,19,15,1,18,14,11,16,13,20,17
"(Grandes aplausos)"5,19,15,1,18,14,16,11,13,20
"Dama de blanco"12
"El Presidente."5,19,15,1,18,14,16,11,13,20
"Plaza de Mayo,"12

Named graphs describing this resource:

1http://purl.org/linkedpolitics/rdf/Czech.ttl.gz
2http://purl.org/linkedpolitics/rdf/Danish.ttl.gz
3http://purl.org/linkedpolitics/rdf/Dutch.ttl.gz
4http://purl.org/linkedpolitics/rdf/English.ttl.gz
5http://purl.org/linkedpolitics/rdf/Estonian.ttl.gz
6http://purl.org/linkedpolitics/rdf/Events_and_structure.ttl.gz
7http://purl.org/linkedpolitics/rdf/Finnish.ttl.gz
8http://purl.org/linkedpolitics/rdf/French.ttl.gz
9http://purl.org/linkedpolitics/rdf/German.ttl.gz
10http://purl.org/linkedpolitics/rdf/Greek.ttl.gz
11http://purl.org/linkedpolitics/rdf/Hungarian.ttl.gz
12http://purl.org/linkedpolitics/rdf/Italian.ttl.gz
13http://purl.org/linkedpolitics/rdf/Latvian.ttl.gz
14http://purl.org/linkedpolitics/rdf/Lithuanian.ttl.gz
15http://purl.org/linkedpolitics/rdf/Maltese.ttl.gz
16http://purl.org/linkedpolitics/rdf/Polish.ttl.gz
17http://purl.org/linkedpolitics/rdf/Portuguese.ttl.gz
18http://purl.org/linkedpolitics/rdf/Slovak.ttl.gz
19http://purl.org/linkedpolitics/rdf/Slovenian.ttl.gz
20http://purl.org/linkedpolitics/rdf/Spanish.ttl.gz
21http://purl.org/linkedpolitics/rdf/Swedish.ttl.gz
22http://purl.org/linkedpolitics/rdf/spokenAs.ttl.gz

The resource appears as object in 2 triples

Context graph